Cámaras dobles en smartphones, qué son y para qué se usan
Durante los últimos años hemos visto cómo los fabricantes de smartphones más populares han implementado cámaras dobles en sus gamas altas. Esta tecnología apunta a convertirse en algo predominante, ¿pero sabías que hay diferentes tipos? Cada empresa ha optado por introducir esto de formas distintas, y hoy vamos a repasar los diferentes tipos de cámaras dobles que nos podemos encontrar y cómo funcionan.
No todos los sistemas funcionan de la misma forma. Cada uno está orientado a llevar a cabo una función que, por lo general depende del sensor secundario. Vamos a ver qué tipos hay y qué teléfonos nos pueden servir cómo ejemplo para ilustrarlos.
Para conseguir una mayor profundidad de campo
El ejemplo más claro es el HTC One M8. Sí, sus fotos eran una completa basura, pero las cosas como son: fue de los primeros en implementar esta tecnología. El sensor secundario (o la segunda lente, como quieras llamarlo) se encargaba de recabar información sobre la profundidad de campo, lo que nos permitía añadir efectos artísticos a la foto. Básicamente, el segundo sensor se encargaba de saber a qué distancia estaba un píxel de otro en la imagen real.
De esa forma se podía conseguir, vía software, un falso bokeh, dando la sensación de que el fondo estaba desenfocado. El problema del M8 es que el segundo sensor tenía una resolución muy baja. Eso provocaba que el software de procesado de imagen no funcionase bien cuando había detalles pequeños o finos como pelo, algo que abunda en los retratos por ejemplo, donde el bokeh cobra más sentido.
Una lente normal y un gran angular / teleobjetivo
Es el caso del LG G6 y el LG V20, o el iPhone 7. En el caso de los terminales LG, la cámara cuenta con un sensor de 16 megapíxeles con una lente de apertura f/1.8, que es el principal, y uno secundario. La segunda lente es un gran angular de ocho megapíxeles que permite capturar más información a nuestro alrededor. De esa forma tienes una cámara para fotos casuales y, si usas el gran angular, una cámara para paisajes o grandes fotos grupales.
Por su parte, el iPhone 7 es completamente opuesto. Cuenta con una cámara normal que tira fotos normales y un teleobjetivo u objetivo zoom. A diferencia del LG G6, el iPhone 7 permite hacer zoom óptico con su lente secundaria, lo que te permite acercar la imagen sin perder nitidez. Eso se debe a que, en lugar de recortar la imagen, está moviendo las lentes que hay dentro de la cámara.
Un objetivo a color y otro monocromo
Es el caso de Huawei P9 y su cámara Leica. En el Huawei P9 nos encontramos una cámara con dos sensores de 12 megapíxeles con apertura f/2.2. Uno de los sensores es a color, y otro es monocromo. El sensor secundario, que es el monocromo, se encarga de conseguir una mejor exposición y contraste gracias a que sus fotos salen en blanco y negro, y ayuda a que la foto a color salga con la máxima calidad posible. También funciona de una forma parecida a la del M8, capturando información sobre la profundidad de campo.
Si te gusta la fotografía, esta puede ser la opción más interesante. El Huawei P9, y todos los terminales que incorporen este tipo de tecnología, pueden hacer uso únicamente del sensor monocromo, permitiendo sacar fotos en blanco y negro puro. En el resto de sensores, el blanco y negro se consigue bajándole la saturación a la imagen, y el resultado no es el mismo ni de lejos.
Las ya en desuso cámaras 3D
Anteriormente también se pusieron de moda las cámaras 3D, cuyo mayor exponente fue el LG Optimus 3D. Dicho terminal tenía dos lentes que permitían sacar fotos en 3D que se podían reproducir en su pantalla, también 3D. Esta tecnología funcionaba regular y dejo de utilizarse, pero fue una de las primeras de este tipo en llegar. Las tres que nos podemos encontrar a día de hoy en el mercado son las que tenéis arriba. El 3D tendrá que esperar.
¿Qué os parece la idea de las cámaras 3D?
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