Google, Android Auto y la conquista del mundo del automóvil
Hablar a día de hoy de un dominio aplastante de Google dentro del mercado tecnológico general mundial es quedarse bastante corto. La empresa de Mountain View se ha introducido en nuestras vidas de forma sutil pero firme, primero con servicios sin los que ahora sería más difícil pasar como el buscador, Google Maps o Gmail, y después con los teléfonos y tablets Android.
Que Android lo ha tenido más fácil para llegar a más usuarios es bastante obvio, no en vano y frente a la competencia estamos hablando de terminales con un sistema operativo que pueden usar distintos fabricantes, y que va incluido en terminales que abarcan una amplia gama de precios. Lo de la optimización ya es otra historia, desgraciadamente.
Sin embargo, Android no se ha quedado ahí. Ha llegado hasta los ordenadores personales, como por ejemplo los HP Slate 21, y hace cosa de un año se presentó oficialmente Android Auto.
¿Qué es Android Auto? Como ya explicamos en su momento, la idea que se encuentra detrás de este proyecto tan ambicioso no es otra cosa que intentar trasladar la experiencia que cualquier usuario pueda tener con su smartphone al entorno del automóvil, y para ello se basaría en una interfaz controlada por comandos verbales.
Esto de controlar el sistema operativo del ordenador del coche con la voz de momento todavía suena un poco a ciencia ficción, y hay quien podría pensar que será muy complicado hacerlo. Nada más lejos de la realidad: Cualquier usuario que ya haya utilizado Android con anterioridad podrá manejarse sin muchos problemas en Android Auto.
Según Andy Brenner, director de productos de automoción de Google, el gigante de la comunicación ha llegado a acuerdos con cerca de una cuarentena de marcas de automóviles. La empresa Compramostucoche ofrece un buen listado de empresas automovilísticas que se han involucrado en el proyecto, y que incluyen a Nissan, Volkswagen, Volvo, Audi, Ford u Honda.
La idea de esta asociación supone no sólo colaborar en el desarrollo de Android Auto, sino también en el desarrollo y prueba de aplicaciones que ayudarían a los conductores a, por ejemplo, escuchar mediante una locución los mensajes de texto que se reciben mientras estamos conduciendo y que últimamente están subiendo como causa de accidentes de automóvil.
El paso más importante en todo este recorrido llegará este año con Android M. Esto supondrá un paso más en la evolución de Android Auto, buscando tener un sistema operativo autosuficiente e independiente. De momento Android Auto necesita conexión con un smartphone para funcionar, pero Android M no lo necesitará en absoluto.
La funcionalidad de Android M se verá aumentada con respecto a la actual de Android Auto, e informará a sus usuarios con datos útiles como la temperatura del motor, la cantidad de gasolina que queda en el depósito o los kilómetros recorridos.
El automóvil es otra frontera que en Google se han propuesto superar, y de conseguirlo la empresa de Mountain View seguiría ganando enteros de cara a una presencia prácticamente total en las vidas tecnológicas de los usuarios. Quizá los coches de las películas de ciencia ficción no estén tan lejos.
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