iFixit explica las razones por las que el Samsung Galaxy Fold está fallando

iFixit explica las razones por las que el Samsung Galaxy Fold está fallando

Los primeros pasos del Samsung Galaxy Fold no están yendo como la firma coreana habría esperado. Tras los problemas experimentados por varios youtubers e influencers tecnológicos que lo estaban probando en primicia, Samsung decidió hace unos días retrasar su lanzamiento mundial al mes de mayo. De hecho, sus responsables señalaron en un comunicado que volverían a sentarse en la mesa de diseño para evitar más problemas.

Nos encontramos ante una tecnología muy joven y no es de extrañar que surjan inconvenientes como estos. Sin embargo, ¿sabemos qué es lo que está fallando en el Samsung Galaxy Fold? iFixit, experta en la reparación de todo tipo de dispositivos electrónicos, nos explica de las claves.

La particularidades de los paneles OLED

Samsung es toda una experta fabricando paneles OLED, de hecho es la referente mundial. Conocemos bien sus ventajas, como el ahorro energético manteniendo una gran intensidad de color, pero, ¿cuáles son sus puntos negativos? Este tipo de pantallas son bastante más frágiles que las LCD, hasta el punto que ligeros roces podrían dañar su superficie. Esto es aún peor si sabemos que, mientras que en los paneles LCD los daños suelen ser localizados, cualquier perjuicio en una pantalla OLED puede causar un fallo general. Además, son más difíciles de reparar cuando están curvadas o son plegables, como en el dispositivo de Samsung.

Otra de las conclusiones a las que han llegado los expertos de iFixit es que son los propios componentes del Galaxy Fold los responsables de algunos de sus daños. A diferencia del Huawei Mate X, que se pliega dejando su pantalla a la vista, el dispositivo de Samsung esconde el panel en el interior, teniendo que soportar la presión de sus componentes internos.

Aquellos que han probado el Galaxy Fold también han tenido que sufrir un curioso fenómeno. Pequeñas partículas de todo tipo se introducían a través de la zona de la bisagra, quedando bajo la pantalla y creando pliegues y deformidades. Estas son bastante peligrosas, ya que pueden dañar los componentes orgánicos del panel. A esto debemos sumarle la presencia de lo que parecía un protector de pantalla, pero que resultaba imprescindible para el funcionamiento del dispositivo. Aquellos que intentaron retirarlo pudieron comprobarlo. Samsung ya anunció que tomaría medidas para que no volviera a ocurrir.

Una máquina no es humana

Las firmas suelen acompañar estos revolucionarios lanzamientos de vídeos que muestran todas las pruebas que han realizado. En este caso, como no podía ser de otro modo, lo importante era comprobar si un dispositivo plegable podría soportar cientos y cientos de flexiones y extensiones.

El dispositivo de Samsung cuenta con una compleja bisagra central, que mantiene unidas sus dos mitades y permite que lo pleguemos. Esta ha sido probada soportando hasta 200.000 movimientos, lo que parece suficiente. Sin embargo, no siempre puede compararse un test de este tipo al uso que le dará una persona real. Ni el plegado se realiza de la misma manera, ni la presión se ejerce en los mismos puntos, las comparaciones no son ni mucho menos exactas.

Es más que probable, Samsung deberá llevar a cabo un importante rediseño de su dispositivo plegable si quiere que acabe funcionando correctamente. Sus responsables saben que hay cosas que deben cambiar, motivo por el que ya están probando nuevas versiones, con más pulgadas y diferentes sistemas de plegado.

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