He probado Android O hace nada, ¿me habrá dejado buen sabor de boca?

¡Android O ya está entre nosotros oficialmente! A muchos les pareció una broma por la sorpresa del imprevisto en su salida pues fue rápido, indoloro y desprevenido, pero es totalmente real. La posiblemente octava versión de nuestro sistema operativo ha llegado para quedarse, aún con Nougat en fase de ascenso.

Y como muchos de vosotros sabréis tengo la suerte de ser el propietario de un dispositivo Nexus compatible con Android O, específicamente el Nexus 5X fabricado por LG. La lista de dispositivos compatibles se reduce a los últimos Nexus, el Nexus Player y los Pixel C y smartphones Píxel. En estos casos Google saca una versión preview beta del sistema para ver la acogida que tiene y la opinión de los usuarios. Pues bien, mi 5X ha pasado por el taller y tras un tedio proceso de restauración Android O ha poseído sus entrañas por unas horas y os voy a comentar qué me ha transmitido lo último de la gran G.

No, revolución no

Como dije hace poco sobre el tocar los límites de Android acerté con mi predicción de que O no sería una revolución como lo fue Lollipo y esto no es malo. Nougat es un gran sistema perfecto para testear diferentes mejoras y solucionar o implementar funciones nuevas y frescas que le den más intuitividad al uso de nuestro móvil. Y en eso es en lo que se basa la O.

Se mantienen las líneas de Material Design básicas con algunos retoques estéticos y unas partes de la interfaz totalmente modificadas, como los ajustes y el panel de accesos rápidos, y poco más. Debo decir que me ha sorprendido que como launcher se use aún el Google Now Launcher, ya que su muerte es anunciada y pensaba que vería el Pixel Launcher preinstalado, pero no. Y voy a decir una cosa clara: el panel de accesos directos es horroroso. Si me estás leyendo, Google, no. Así, no. Ya lo veréis...

El blanco va haciéndose paso

Es curioso, porque la interfaz más cambiada es la de los ajustes, pasando a ser totalmente blanca con los iconos en azul, con motivos grises. Se ha eliminado la barra lateral que servía como accesos directos que se implementó en Nougat, aunque puede ser porque o no ha sido bien acogido o que no les ha dado tiempo en la preview, lo cuál es lo más plausible. Y es la única parte que ha sufrido un cambio radical por lo menos de color, puesto que todos los demás menús mantienen toda su estética. O sea, lo que es una cosa bien hecha que puedes mejorar.

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Por lo demás, las mejorías más notables no las he podido palpar directamente puesto que he disfrutado de la preview un par de horas, ya que es mi principal herramienta en el día a día y ya lo pasé algo mal cuando probé Nougat en sus fases tempranas, por lo que no me puedo permitir muchos errores. Sin duda no le faltan novedades, y habrá que esperar a las siguientes previews para ver qué se queda, y que no.

No hay mucho más que decir más que el rendimiento y la batería se hacen más presentes con la mejoría del sistema puesto que me ha sorprendido gratamente el buen ritmo que ha llevado mi 5X con una preview. Sin duda es una grandísima noticia, puesto que nos hace ver lo maduro y grande que está ya nuestro pequeño androide, por lo que sólo podemos esperar a ver qué pasa con la O. Porque la O mola.

¿Te gustaría probar Android O?

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