Las matrículas de coche con emojis están a punto de llegar a Estados Unidos

Todos querríamos ponerle algo de humor y color a nuestras matrículas de coche, pero es que a veces el futuro atropella a las diferentes administraciones, que se mueven siempre como tortugas a la hora legislar y tomar decisiones. Este es uno de esos casos, y es que los emojis forman ya parte de nuestra forma de comunicarnos desde hace ya mucho tiempo, y tan sólo dos países han anunciado que estudian añadirlos a las matrículas personalizadas.

Hablamos cómo no de Australia, que hace tiempo ya anunciaba sus planes de integrar emojis en las matrículas de coche de Queensland, y ahora son los Estados Unidos, siempre pioneros, los que estudian la posibilidad de permitir hasta seis emojis diferentes en sus matrículas de coche.

Eso sí, hemos de reconocer que tal y como nos contaban desde Engadget en realidad no son los Estados Unidos como país, al completo, sino sólo el estado de Vermont el que prepara un proyecto de ley que permitirá agregar una pizca de color a las matrículas personalizadas de sus vehículos, y obviamente no es algo tan divertido como el proyecto Mojipic que vimos hace un tiempo en Indiegogo, el cual nos prometía una pantalla para vehículos con la que expresar nuestras emociones de forma instantánea, usando la voz y en forma de emoticonos.

Parece interesante y muy divertido, pero no lo es tanto porque sólo nos permitirán elegir entre seis emojis preseleccionados... ¡Olvidad la caquita en vuestras matrículas!

No es tan interesante ni divertido, porque en este caso no podremos poner una caquita sonriente ni nada parecido en nuestras matrículas de Vermont, sino sólo elegir entre seis emojis predefinidos que las autoridades elegirían para nosotros en caso de que el proyecto de ley prospere de forma definitiva en la Cámara de Representantes del estado norteamericano.

De hecho, el proyecto presentado por la demócrata Rebecca White ni siquiera confirma qué seis emoticonos estarían disponibles, y éstos además se agregarían de forma directa a la combinación de letras y números habitual que el Comisionado de Vehículos Motorizados de Vermont asigne al coche en cuestión, por lo que la personalización no es total ni completa y la matrícula del vehículo a efectos oficiales no tendría nada que ver con el emoji.

Hablando ya en clave económica, cabe recordar que añadir uno de los cinco emojis disponibles en Queensland, Australia, cuesta aproximadamente unos 300 euros al cambio actual, y de la cantidad de dólares que habría que abonar en Vermont, Estados Unidos, todavía no se ha hablado... Sin duda es algo caro ponerle una carita sonriente a tu matrícula, ¿no?

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