5 formas de acelerar tu móvil o tablet Android que funcionan

Todos sabemos que, pasado un tiempo, los teléfonos empiezan a funcionar no tan bien como el primer día. El día a día, nuestro uso habitual e incluso la propia degradación de los componentes hacen que los teléfonos vean cómo su rendimiento se resiente. Hay cosas, como la pérdida de batería, que no podemos evitar porque son pura química, pero sí es cierto que, siguiendo ciertas pautas, podemos hacer que el teléfono vuelva a funcionar bien.

No vamos a recomendar un optimizador ni un antivirus (de hecho, si lo tenéis instalado, ya podéis desinstalarlo). Son trucos accesibles y sencillos que todos podréis realizar. Sin más dilación, ¡vamos al lío!

Desinstala las aplicaciones que no utilices

¿Para qué quieres tener apps consumiendo almacenamiento y recursos en tu terminal si no las usas para nada? Si tienes apps que lleves tiempo sin usar, lo mejor es eliminarlas. Yo, por ejemplo, cuando llevo una semana sin usar una aplicación la desinstalo, porque no la quiero para nada. Seguramente tengas más de un juego o app que no uses. Si no la usas, ¿por qué conservarla?

Usa un launcher personalizado

Si usas el lanzador que tu teléfono trae preinstalado por defecto, es más que posible que estés lastrando el rendimiento de tu termina. Lo mejor es que uses uno que esté bien optimizado como Nova Launcher. No hace falta que pagues la versión Pro, ya que la gratuita funciona más que sobradamente. Esto es especialmente recomendable si tu terminal es un Samsung, ya que el launcher de TouchWiz funciona nada más que regular.

Elimina los widgets innecesarios

¿Tienes 40 widgets en la pantalla? Pues eso está haciendo que tu terminal se ralentice. Estoy completamente seguro de que tienes alguno que no usas nunca pero que lo tienes ahí porque sí. Por ejemplo, el acceso directo a la linterna, las GeoNews de Samsung, Galaxy Apps, el widget de Facebook, el del reloj, el tiempo, el correo... ¿los usas todos? ¿Son todos igual de útiles? Si la respuesta es no, ponte a eliminarlos de tus escritorios cuanto antes.

Los widgets se actualizan en segundo plano y consumen recursos de tu terminal. Si notas que el teléfono va lento, prueba a quitar algunos widgets. Seguro que notas la diferencia en cuestión de segundos.

Un reseteo de fábrica de vez en cuando nunca viene mal

Si notas que tu teléfono no va todo lo fino que debería ir, quizá te interese hacerle un reseteo de fábrica. Esto eliminará "todo" lo que tienes en tu terminal y lo dejará como "recién salido de fábrica". Lo pongo entre comillas porque no es del todo así. Hay algunos restos que se quedan en el dispositivo. Si quieres dejarlo como nuevo, lo mejor es reinstalar la ROM (el sistema operativo) desde cero, algo cuyo proceso varía según el modelo.

Google Maps es tu peor enemigo

Google Maps consume una enorme cantidad de recursos en segundo plano. La aplicación se queda corriendo en la multitarea, además de acceder continuamente a nuestra ubicación para mandarnos notificaciones y recomendaciones. Desactiva las notificaciones, o incluso desinstala Google Maps y usa otra app, como Waze o Here WeGo.

Por otro lado, y ya para acabar, cabe hacer las recomendaciones de rigor. No olvides actualizar el sistema operativo de tu móvil y las aplicaciones. Por lo general, estas actualizaciones arreglan problemas de funcionamiento, lo que puede ayudar a resolver posibles gastos extra de batería y recursos. ¡Disfruta de tu "nuevo" teléfono!

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