Si Google se rinde al notch, Android habrá perdido una importante batalla

Si Google se rinde al notch, Android habrá perdido una importante batalla

2018, el año de los clones. Históricamente, siempre ha habido similitudes e "inspiraciones" entre unas firmas y otras, pero lo de este año es de locos. El 90% de la gama alta Android es una copia del iPhone X, el notch es una alternativa, no algo obligado para reducir marcos, y si no, que le pregunten a los Vivo, al Samsung Galaxy S9 o al Xiaomi Mi Mix 2S, no hace falta un notch para tener un buen diseño.

Google, lleva dos años presentando sus generaciones Pixel, unos móviles que se caracterizan por ser distintos a toda la gama alta, para bien, o para mal. Las últimas filtraciones de los Google Pixel 3, muestran que el modelo XL, el aspirante a rey del trono en Android, tendrá un notch. Malas noticias para los usuarios, que verán cómo hasta la gran G, se ha tenido que rendir al diseño de Apple.

Rendirse al notch es darle la razón a Apple

Si Google se rinde al notch, Android habrá perdido una importante batalla

Me encantaría ver sobre una mesa a decenas de los terminales recién presentados este año con la pantalla apagada, sería ridículo. Clones de clones, un mismo diseño frontal cuya única variación es los pocos milímetros que haya de diferencia entre los marcos, y el tamaño del propio notch. Google ya ridiculizó hace unos años a Apple, ya que fueron de los primeros en eliminar el jack de auriculares. En el nacimiento de los Pixel 2, eliminaron esta entrada de 3.5mm, sin volver a hacer referencia de Apple.

Este año, parece que repetirán los pasos. El Pixel 3 XL tendrá un notch, una muesca que sí o sí resta espacio útil de la pantalla, y que no aporta absolutamente nada nuevo.

"No me importa tener notch"

Si Google se rinde al notch, Android habrá perdido una importante batalla

Si algo tengo claro, es que si me voy a gastar casi 1.000 euros en un teléfono, este se tiene que adaptar a mi, y no yo a él. Jamás entenderé el argumento de "es que al notch te acostumbras". Estamos admitiendo que hemos desembolsado una gran cantidad de dinero, que el móvil tiene algo que no es de nuestro agrado, pero que "te acabas acostumbrando", es decir, adaptándote tú a él.

Sí, he probado el notch, te acostumbras, pero sigue siendo molesto. Y antes de que esgrimas el argumento de que "se podrá ocultar por software", decir que, en mi opinión, esta es una opción chapucera, que acaba añadiendo marco digital al teléfono. Si no nos gustan los marcos físicos, imagina los digitales, en fin.

Google tiene los medios para hacer un Pixel sin notch

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Es Google, ¡GOOGLE! Evidentemente, la gran G tiene medios de sobra para crear un terminal precioso sin necesidad de incluir la dichosa ceja, aunque quizás, con este Pixel 3 XL, quieran por fin sumarse a la tendencia del mercado. El primer año, la distribución fue un desastre. Este pasado 2018, el segundo modelo llegó gracias a la distribución de Orange y su venta en tiendas como la oficial de Google, aYaphone o Amazon, y este Pixel 3 XL, podría llegar con una distribución aún mejor.

Optar por un diseño "comercial" podría ser la pista que nos indique que Google por fin quiere que su Pixel se venda al nivel de los demás flagships, una buena noticia por un lado, pero que no quita la contrapartida de tener un Pixel similar al iPhone por delante. Si Google quiere presentar a su particular rival del iPhone, no debería inspirarse en él, y mucho nos tememos que esto es lo que va a suceder.

El día que Apple quite el notch, quedaremos en ridículo

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El tema del notch no sería tan dramático si no tuviésemos rumores de que esta fue una solución temporal de Apple, y que lo quitarán en cuanto les sea posible. El argumento de que no es posible tener un bezel-less sin notch desaparecerá en cuanto Apple idee la solución a esta ceja, y en ese momento, todos los Android que optaron por copiar al iPhone X, quedarán en una mala posición.

Seguir una tendencia de mercado no está mal, hasta cierto punto, y con el notch se nos está yendo de las manos. Como siempre, el poder de decisión recae en el usuario; esperar a que se presente la nueva generación de smartphones sin notch, o resignarse y acostumbrarse a esta ceja. ¿Qué decides?

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