Google a la Unión Europea: "vuestras leyes dañan a los negocios y a los usuarios"
La compañía acusa a Bruselas de provocar productos peores y precios más altos con sus normativas

Google y la Unión Europea han vuelto a las andadas. La compañía de Mountain View ha criticado duramente a las autoridades europeas, asegurando que la Ley de Mercados Digitales perjudica a usuarios y empresas por igual. Durante un taller organizado por la Comisión Europea, los abogados de Google defendieron que las normativas actuales están provocando "peores productos y experiencias en línea para los europeos".
Los números que maneja Google son llamativos. Como recoge Android Headlines, los europeos pagan más por billetes de avión al no poder acceder directamente a las aerolíneas a través del buscador. Las empresas turísticas hablan de caídas del 30% en reservas directas, y los usuarios se encuentran con procesos más engorrosos para llegar a los servicios que buscan.
Google contraataca
Clare Kelly y Oliver Bethell, los abogados de Google, sacaron estos argumentos a relucir durante un taller donde se discutían las acusaciones de la UE por supuestamente favorecer los servicios propios de la compañía frente a la competencia. Google se enfrenta a multas que pueden llegar al 10% de sus ingresos globales si Bruselas confirma que ha violado la Ley de Mercados Digitales.
Pero Google no se ha quedado ahí. En su blog corporativo, la empresa ha ido más allá y asegura que las normas complican el funcionamiento de sus servicios al imponer restricciones que afectan la experiencia del usuario en Android y Play Store. La compañía lo tiene claro: si no puede cobrar tarifas razonables, no podrá seguir invirtiendo en mantener una plataforma abierta.
Esta no es la primera vez que Google planta cara a la regulación europea. La compañía ya se negó anteriormente a permitir la verificación de contenidos en YouTube y su buscador, desafiando los planes europeos para regular la desinformación. El pulso sobre el control de la información se ha convertido en una constante entre Google y Bruselas. Google no está solo en esta batalla. OpenAI llegó a amenazar con abandonar Europa por las exigencias regulatorias sobre inteligencia artificial, lo que demuestra que el choque va más allá de Google y afecta a todo el sector tecnológico estadounidense.
Bethell ha pedido durante el taller "detalles precisos" sobre los requisitos de cumplimiento y ha exigido a los críticos que presenten pruebas sólidas de costes y beneficios. Google busca claridad en las reglas mientras apela una multa anterior de 4.125 mil millones de euros por prácticas anticompetitivas en Android.
Lo que está en juego es el futuro del panorama digital europeo. Mientras Bruselas intenta poner límites al poder de los gigantes tecnológicos, Google defiende que las medidas actuales perjudican a quienes deberían proteger. La pugna entre regulación e innovación sigue escalando, y las consecuencias pueden sentirse mucho más allá de las fronteras europeas.