Google quiere que la IA sirva para aprender mejor, no solo para impresionar
Google invierte 30 millones en IA educativa con estudios científicos tras demostrar una mejora del 5,5% en matemáticas con 165 estudiantes británicos
Google ha puesto sobre la mesa 30 millones de dólares para los próximos tres años en proyectos educativos basados en inteligencia artificial, con estudios científicos que midan de verdad si esto funciona o no. La cosa viene motivada por las dudas que están surgiendo sobre si las herramientas actuales de IA realmente mejoran el aprendizaje o simplemente generan contenido sin más. Con ChatGPT, Gemini y compañía saturando las aulas sin demostrar eficacia real, el movimiento de Google busca marcar distancias con datos concretos.
La compañía presentó todo esto en un evento en Londres donde reunió a gente del sector educativo para hablar en serio sobre el tema. Lo más llamativo son los resultados de 165 estudiantes británicos de 13 a 15 años que han probado su sistema de tutoría matemática integrado en Gemini 2.5, consiguiendo un incremento del 5,5% en la resolución de problemas nuevos. No está mal para empezar.
Estonia se convierte en laboratorio a gran escala
Del programa que más se va a hablar es del AI Leap en Estonia, que dará acceso a Gemini Education a 20.000 estudiantes y profesores durante todo el curso escolar. Esto va en serio: no son pruebas piloto de tres semanas, sino una implementación masiva que permitirá evaluar cómo se comporta la IA cuando se integra de verdad en un sistema educativo completo.
En paralelo, YouTube desarrollará en Reino Unido una herramienta de IA conversacional para vídeos educativos que generará resúmenes automáticos, preguntas contextualizadas y tests que se adapten al nivel de cada estudiante. ¿En qué se traduce esto? En que cualquier chaval podrá preguntarle cosas a un vídeo de matemáticas o historia y recibir respuestas personalizadas según lo que sepa o no sepa.
La iniciativa contrasta con lo que está pasando ahora mismo en las aulas. Un estudio reciente ha demostrado que el 90% de las lecciones generadas por IA se centran en memorización sin fomentar el pensamiento crítico. Google dice que sus herramientas estarán basadas en principios científicos del aprendizaje, algo que suena bien sobre el papel pero que habrá que ver cómo se materializa.
También Google.org va a financiar organizaciones que trabajan en alfabetización digital y acceso equitativo, como la Raspberry Pi Foundation, Fab Inc. y Playlab. Además, han publicado un manual de recomendaciones para profesores sobre cómo usar la IA de forma efectiva, algo que viene de perlas después de los primeros casos de sanciones académicas por mal uso de estas herramientas en institutos y universidades.
Como viene siendo habitual en el sector tecnológico, las grandes promesas están dejando paso a implementaciones que se pueden medir y evaluar. Esta apuesta por la evaluación científica rigurosa pretende demostrar si la IA puede transformar de verdad el aprendizaje o si seguirá siendo una herramienta más de automatización sin impacto real en la educación.