Queda demostrado lo que todos sabemos: en Android odiamos pagar por las apps
Android, nos guste más o nos guste menos, arrastra el estigma de las aplicaciones piratas. El hecho de poder instalar aplicaciones de orígenes desconocidos hace que una app o juego de pago pase, fácilmente, a ser de acceso libre gracias a un iluminado que sube a Internet el archivo APK y sus datos. ¿A qué se debe esto? Puede que el hecho de que los smartphones Android permitan instalar apps de sitios ajenos a Google Play fomente la piratería, pero creo que el verdadero motivo es que, simple y llanamente, no nos gusta pagar por las apps.
Los datos hablan por sí solos. El año pasado, Google Play superó ampliamente a la App Store de los iPhone en número de descargas de aplicaciones, pero, sin embargo, fue la empresa de la manzana la que se quedó con la mayoría de beneficios. Dicho de otra forma, los usuarios Android descargamos muchas apps, pero gratis. Los usuarios de iOS descargan menos apps, pero no tienen problema a la hora de pagar por ellas.
En Android no pagamos por las apps y juegos ni con el dinero de otro
Un análisis de Appbrain también da la razón a la premisa de la que parte este artículo. Actualmente, en el momento en que se escriben estás líneas, existen en Google Play 3.417.720 aplicaciones. De ellas, 224.529 son de pago. Pues bien, mira cómo varía el número de descargas en función del precio. La barra de arriba muestra el número de descargas de apps gratis; la de abajo, lo mismo pero en apps de más de 10 euros. En morado, el número de apps con menos de 500 descargas. En amarillo, aquellas con más de 50.000.
Como puedes observar, conforme las aplicaciones se encarecen se reduce el número de descargas de forma exponencial. Solo 317 aplicaciones cuyo precio es inferior a un euro han obtenido más de 50.000 descargas, y solo 55 han superado la cifra con un precio superior a 10 euros. Cuanto más barata es una app, más descargas obtiene, es normal, pero la diferencia de descargas que hay entre una app gratis y una app de menos de un euro roza lo absurdo.
Desde mi punto de vista, está claro que en Android tenemos que cambiar de mentalidad. No está mal descargar apps gratis, pero entonces no vale quejarse de que tienen anuncios o micropagos. No vale quejarse de que hay muchas apps de mala calidad cuando, después, no se está dispuesto a pagar por las que son buenas. En el momento en el que los usuarios entiendan que las cosas conllevan un esfuerzo, que hay un trabajo detrás de todo el contenido, sean apps, juegos, artículos o vídeos, cambiarán las cosas. Hay que apostar por las apps de pago, por los desarrolladores y por los creadores, porque sin ellos, Android no sería lo que es.
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