Huawei quiere acabar con la conducción colérica: frenará la ira de carretera con esta ingeniosa patente

Huawei quiere acabar con la conducción colérica: frenará la ira de carretera con esta ingeniosa patente

Huawei dio a conocer recientemente su nueva familia Mate 30, unos teléfonos inteligentes que apuestan fuertemente por la fotografía. La firma china, tras recuperarse del veto de Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, también trabaja en nuevos dispositivos y tecnología. Al anuncio de sus nuevos smartphones se sumó su smartwatch Huawei Watch GT 2, y ahora parece que lo último de Huawei es frenar la ira de carretera con una ingeniosa patente.

Huawei ha patentado un nuevo "detector de ira de carretera" que, gracias a un equipo de cámaras, ayuda a que los conductores vigilen su nivel de estrés y poder así reducir de forma automática la velocidad o, incluso, parar el coche si el conductor está 'agitado', como informan desde The Telegraph. La compañía ha solicitado dicha patente para que el sistema esté integrado en los futuros vehículos inteligentes.

Esta tecnología emplea una serie de cámara térmicas que sirven para detectar cambios en la presión arterial, mientras que otra cámara se encarga de rastrear las manos del conductor. De esta manera, si el sistema de seguimiento de conductores patentado por Huawei ve a un conductor que hace un gesto como subir un puño, o si levanta el dedo de la mano que no es amistoso, podría hacer que el vehículo frene o que reduzca la velocidad de forma automática.

Esta tecnología controla el estado de ánimo de los conductores

Fondo de pantalla de coche BMW

Huawei también ha sugerido que en un futuro el volante del coche podría comenzar a vibrar como mecanismo para que alertar a los conductores de que deben relajarse. Incluso, según el mismo medio, la patente también habla de un micrófono en el coche que sirve para monitorear el habla de un conductor. De esta forma, el coche podrá reducir la velocidad de forma automática si el conductor empieza a maldecir, gritar o a golpear el interior del automóvil.

El objetivo de la firma china con esta nueva tecnología ha surgido debido a que los conductores frustrados o con ira de carretera suelen "reaccionar de manera más errática, y a veces con tiempo de reacción más lento", en carretera. Al controlar el estado de ánimo de los conductores, este sistema podrá controlar el coche para pararlo en caso necesario y para reducir la velocidad, y así evitar cualquier tipo de accidente.

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