Esta webcam de Logitech graba tan bien que parece una cámara profesional y cuesta muy poco

Hoy en día casi todos tenemos una cámara en el portátil, pero seamos sinceros: la mayoría dejan mucho que desear. Imagen borrosa, colores raros, sonido flojo y encima los hay que parece que te graba desde un microondas. Por eso, cuando pruebas una webcam de Logitech, entiendes rápido por qué es la marca a la que casi todo el mundo acaba recurriendo. Llevan años haciendo ratones, teclados y cámaras que simplemente funcionan, y la Logitech C925e es justo eso: una webcam que cumple sin historias.

Se ve bien, se escucha bien y no da guerra

Puedes ocultar la cámara en cualquier momento

La conectas por USB, se instala sola y en menos de un minuto ya estás en una videollamada viéndote bien, sin tener que ajustar nada. Se nota la diferencia enseguida: la imagen es clara, los colores se ven naturales y el enfoque automático hace su trabajo sin marearte. Si te mueves, gesticulas o te acercas a la pantalla, sigue tu ritmo sin perder nitidez.

Lo bueno es que no necesita que tengas una habitación perfectamente iluminada. Gracias a la tecnología RightLight 2, se adapta sola a la luz que tengas. Aunque estés con una lámpara encendida o con el sol entrando por un lado, la imagen sigue viéndose bien, sin ese efecto de “fantasma blanco” que dan muchas webcams baratas.

Y el sonido, otro punto que suele fallar en muchas cámaras, aquí va de lujo. Los micrófonos estéreo recogen la voz clara y sin ruidos raros, así que puedes hablar normal sin tener que gritar ni usar auriculares. Ideal para reuniones, clases o incluso grabar vídeos si estás empezando con contenido online.

También tiene detalles pequeños que se agradecen mucho, como la tapa de privacidad. Terminas la reunión, bajas la pestaña y listo, cámara cerrada. No te quedas con la paranoia de si está encendida o no. Además, es robusta, se sujeta bien al monitor y no parece de plástico barato. Además, funciona con Windows, macOS y prácticamente cualquier plataforma de videollamadas. Enchufas, abres Zoom o Meet y listo.

Por menos de 60 euros, es una de esos gadgets que complementarán a la perfección tu set de trabajo o entetenimiento . Y viniendo de Logitech, sabes que te durará años. No promete milagros, ni falta que hace: simplemente da buena imagen, buen sonido y cero complicaciones.

Si trabajas desde casa, das clases o haces videollamadas a menudo, esta cámara es de esas que te hacen la vida más fácil sin gastar un dineral. Una de esas cosas que, cuando las pruebas, piensas que has invertido bien en esta compra a largo plazo.

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