Pon esta TV de 65 pulgadas en tu salón y prepárate para que cada peli, serie o partido te deje con la boca abierta sin moverte del sofá
Gracias a su tamaño y nitidez, cualquier partido o película se ve de lujo, aunque estés a varios metros de la pantalla
La TCL 65Q7C 65 pulgadas es de esas teles que cuando la ves encendida piensas que estás ante otro nivel. Amazon la tiene ahora por 783,90 euros, que comparado con los 1.099 euros que cuesta normalmente, es un ahorro bastante jugoso. No es solo por el precio, sino por lo que te llevas: una tele enorme, con una calidad de imagen que hace que quieras apagar todo lo demás y quedarte mirando la pantalla.
Por qué quedaría perfecta en tu salón

El audio corre a cargo de Bang & Olufsen, ofreciendo un sonido nítido y envolvente que convierte cualquier película o serie en toda una experiencia de cine en casa.
La pantalla es gigante, perfecta si te gustan las pelis o las series como si estuvieras en el cine, pero también para jugar. Los 144 Hz Motion Clarity Pro permiten que todo se vea fluido, sin saltos ni parpadeos, y el HDR y la tecnología QD-Mini LED le dan un contraste distinto. El sonido tampoco decepciona, con los altavoces de Bang & Olufsen, no necesitas una barra de sonido extra si no quieres.
Para colocarla, tienes opciones: si tienes un mueble ancho, entra perfecta y ocupa el espacio justo sin sentirse gigante. Si prefieres la pared, un soporte articulado la deja flotando y limpia el salón, y todavía tienes margen para poner una planta o alguna lámpara debajo. Lo bueno es que el tamaño invita a alejarse un poco: con un par de metros entre el sofá y la pantalla ya la disfrutas como debe ser.

Cuenta con múltiples puertos para todos tus dispositivos, y más
Los que la compran en Amazon la valoran con 4,3 de 5 estrellas y repiten cosas como “la imagen es brutal” o “el sonido sorprende para ser la tele sola”. También destacan que la conexión con otros dispositivos es sencilla, que el sistema Smart TV es intuitivo y que el mando no es complicado. Conectas, configuras y listo, ya puedes abrir Netflix, YouTube, juegos o incluso usar la función de Game Master y FreeSync Premium Pro si te apetece darle caña a los videojuegos.
Otra cosa que mola es que, aunque sea grande, no da sensación de “mueble enorme” porque el diseño es limpio y fino. Los bordes son minimalistas, el panel casi sin reflejos y la construcción transmite calidad sin ser aparatosa. Es de esas teles que miras y piensas que pega con cualquier salón, sea moderno o más clásico.
En definitiva, esta televisión es para quien quiera una tele que se note en casa, que impresione al encenderla y que no sea un lío de usar. Por 783,90 euros en Amazon, la sensación es de estar llevándote algo de gama alta sin dejarte una fortuna, y eso se agradece cuando llegas a casa, la enciendes y te das cuenta de lo mucho que cambia la experiencia de ver cualquier contenido.
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