Samsung Galaxy S8, uno de los smartphones más difíciles de reparar según iFixit

Samsung Galaxy S8, uno de los smartphones más difíciles de reparar según iFixit

Un diseño tan espectacular como el del Samsung Galaxy S8 también tiene sus desventajas. La fragilidad es uno de los principales, pero algunos usuarios pasan por alto otro aspecto igual, o más importante como lo es el de la "reparabilidad".

Y es que cada vez son más los usuarios que deciden reparar sus smartphones por sus propios medios, ya sea cambiar la pantalla, o algo que, en un principio debería ser sencillo de reemplazar, como la batería.

Desafortunadamente, aquellos que estuvieran pensando en comprar el nuevo terminal estrella de Samsung, no lo tendrán tan sencillo a la hora de reparar su smartphone. Según ha podido comprobar la gente de iFixit, el Galaxy S8 es uno de los terminales más difíciles de reparar del mercado.

El Samsung Galaxy S8 obtiene una puntuación de 4 sobre 10 en iFixit

Desmontaje Samsung Galaxy S8

La nueva creación de Samsung ya ha pasado por la mesa de los chicos de iFixit, que no han dudado ni un momento en acceder al interior del terminal, y ver qué esconde el que está llamado a ser uno de los mejores terminales del año.

Debido a la fabricación del cuerpo del dispositivo, en aluminio y cristal, el proceso del desmontaje del terminal es toda una odisea. En primer lugar, para poder retirar el panel trasero de vidrio, es necesario calentarlo para ablandar el material adhesivo que lo sujeta. De esta forma, es muy sencillo que el cristal pueda acabar rompiéndose.

Lo mismo sucede a la hora de retirar la pantalla del chasis del dispositivo. Debido a la curvatura del panel, así como a su fragilidad, es casi inevitable romper la pantalla a la hora de retirarla, lo cual obligará al usuario a reemplazarla por una nueva.

Samsung Galaxy S8 reparación batería

Por suerte, todo parece ser mucho más sencillo en el interior del dispositivo gracias a la "modularidad" de los componentes. Gracias a esto, es fácil identificar y reemplazar los componentes internos de los Samsung Galaxy S8 y S8+ tales como la batería, los módulos fotográficos o el lector de huellas dactilares.

Aunque pudiera parecer que Samsung a fabricado el dispositivo con el objetivo de que no pueda ser reparado por los usuarios, lo cierto es que existe una notable mejora con respecto a la anterior generación, pues, si hacemos memoria, recordaremos que los expertos de iFixit puntuaban al Galaxy S7 con una nota de 3 sobre 10, un punto menos que en el caso de esta nueva edición.

En definitiva, lo más recomendable es mantener a salvo el terminal con una de las muchas fundas disponibles en el mercado, y en caso de accidente, asistir a un técnico especializado que sea capaz de reparar nuestro flamante dispositivo sin poner en peligro su integridad --y nuestra cartera--.

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