Samsung Galaxy Z Flip: primeras impresiones con el nuevo móvil plegable de Samsung

Samsung acaba de presentar el Samsung Galaxy Z Flip, un terminal que da el pistoletazo de salida a la segunda familia de terminales plegables de la compañía, pero que, a diferencia del Samsung Galaxy Fold --que ya hemos analizado--, no es una tablet en miniatura, sino que utiliza la tecnología plegable para conseguir que el dispositivo ocupe mucho menos que cualquier smartphone actual. De hecho, incluso cabe en la palma de la mano.

Hemos podido probar el terminal de la compañía coreana, y te vamos a contar cuáles han sido nuestras primeras impresiones de uso con este dispositivo, en el que Samsung, una vez más, ha apostado por el diseño y la innovación para traernos un terminal que parece que tiene mucho que decir.

Ficha técnica y primeras impresiones del Samsung Galaxy Z Flip

Un diseño y una comodidad sin rival

Ya te lo adelanto: el Samsung Galaxy Z Flip es un terminal que, a nivel de comodidad, no tiene rival. Estamos ante un móvil bastante estrecho, con 73 milímetros de ancho, que cabe en cualquier tipo de mano, y que permite que agarremos el móvil con mucha seguridad, evitando el riesgo de caída que tenemos en otros terminales de gran tamaño.

Pero mejor, empecemos hablando de materiales. Este dispositivo está construido en metal y cristal, por lo que las buenas sensaciones a la mano están aseguradas, aunque, como siempre, el cristal de la trasera con efecto espejo es un imán para las huellas dactilares. Aunque esto se arregla fácilmente poniendo la funda que Samsung incluye en la caja del dispositivo, que además protegerá el terminal frente a los rayones.

Bien, si miras su parte trasera, verás que el Galaxy Z Flip cuenta con una doble cámara trasera compuesta de un sensor ultrawide de 12 megapíxeles y un sensor principal de 12 megapíxeles, y justo a su lado tenemos una pequeña pantalla alargada de 1,1 pulgadas que cuenta con diversas funciones que te contaremos luego para evitar que abramos el dispositivo, como por ejemplo el Always On Display para ver la hora y las notificaciones.

No encontramos lector de huellas dactilares bajo la pantalla ni en la parte trasera, ya que Samsung ha decidido introducir este en el lateral derecho del terminal, una posición que, por experiencia, me parece bastante cómoda y acertada para dejar la trasera lisa y ahorrar espacio en el interior del terminal.

Este lector de huellas --que también es el botón de encendido-- está bajo los botones de volumen, y debajo de este se encuentran los componentes que permiten que el terminal se pliegue hacia dentro, y que no entre ninguna partícula de polvo en la bisagra del mismo gracias a su sistema de barrido, en el que Samsung ha trabajado mucho.

La pantalla del terminal, que es una Dynamic AMOLED de 6,7 pulgadas está recubierta de un cristal diferente al del Samsung Galaxy Fold, que hace que la experiencia sea mejor, y se note menos bruta. Aunque, eso sí, se nota un poco al tacto la zona en la que el terminal se pliega. Algo que, personalmente, no me ha molestado debido precisamente a la suavidad de la pantalla.

El Galaxy Z Flip cuenta con un cristal que ofrece mejor experiencia al tacto, protecciones en el cierre y un diseño que nos ha encandilado

Cabe destacar que la pantalla cuenta con unos marcos que sobresalen un poco, en los que se encuentran los imanes que mantienen cerrado el dispositivo, y en estos, encontramos unas pequeñas gomas que van a servir para amortiguar el impacto que puede sufrir dicho marco cuando efectuamos el cierre del Galaxy Z Flip.

Y la experiencia con esta también ha sido muy buena, ya que, por lo que hemos podido ver, cuenta con unos colores más naturales que los de una SuperAMOLED habitual, pero no pierde esa fuerza en los negros y en los colores fuertes que caracterizan a estos paneles.

Software para aprovechar las particularidades del terminal

Se trata de uno de los dispositivos más especiales de Samsung, y la compañía coreana lleva años demostrando con su Galaxy Note que es capaz de potenciar la experiencia que ofrecen sus terminales más diferentes mediante el software. Y en este caso, no es diferente.

En primer lugar vamos a hablarte de la pequeña pantalla de 1,1 pulgadas que el terminal aloja en el exterior. Bien, esta está ubicada en esta posición para evitar que abramos el móvil en más de una ocasión, y para ello, y aprovechándose de la tecnología AMOLED de este pequeño panel, cuenta con Always On Display para que veamos la hora en todo momento sin necesidad de abrir el terminal.

Esta pequeña pantalla es táctil, y deslizando el dedo encima podremos acceder a las notificaciones --de las que se mostrará una previsualización-- que hayan llegado al dispositivo, así como al control de la reproducción multimedia, que también es bastante útil para no tener que abrir el Galaxy Z Flip si queremos cambiar de canción.

Por otra parte, si hacemos doble click en el botón de encendido, activaremos la doble cámara trasera, y podremos hacernos un selfie con ella utilizando la pequeña pantalla. De hecho, si tocamos esta alternaremos entre la cámara normal y la ultrawide, y pulsando los botones de volumen tomaremos la foto que irá directamente a la galería.

Además de esta función, Samsung ha decidido introducir en el terminal el llamado Flex Mode. Es decir, vamos a poder doblar el terminal en varias posiciones, hasta dejarlo en un ángulo de 90 grados, tal y como hacemos con un ordenador portátil. Y esto puede ser algo que, cuando tengamos el móvil encima de la mesa, puede sernos de lo más útil, por ejemplo, para llevar a cabo una videollamada.

Pues bien, Samsung ha abierto a los desarrolladores de cualquier aplicación la posibilidad de aprovechar este modo para dividir el contenido en dos y readaptar la interfaz para poder ver este contenido de forma muy cómoda. Ahora mismo, son compatibles con este Flex Mode aplicaciones como YouTube o la cámara, pero Samsung nos ha confirmado que este modo llegará a todas las aplicaciones del sistema, así como a cualquier aplicación de terceros, siempre y cuando los desarrolladores decidan adaptarlo.

Conclusiones preliminares tras el uso del terminal

He podido utilizar el terminal y ver su funcionamiento en prácticamente todos los aspectos, desde potencia hasta cámara y añadidos de software, que bajo mi punto de vista es uno de los apartados en los que mejor trabajo ha hecho la compañía coreana. Samsung ha trabajado mucho en este apartado, y es de reconocerle.

Este Samsung Galaxy Z Flip cuenta con muchos argumentos a su favor, y lo cierto es que, pese a su gran precio, se trata de un terminal que deberías considerar si tienes pensado cambiar de smartphone y el diseño y el aprovechamiento del espacio son tus mayores preocupaciones. Ah, y también si no tienes límite de presupuesto.

Y es que, este dispositivo permite que lo pleguemos para que quepa en la palma de nuestra mano, y eso es algo que muchas personas agradecemos enormemente, ya que con el tamaño que han alcanzado los smartphones actuales, llevarlos en el bolsillo a veces se hace misión imposible.

Aún hay aspectos que no hemos podido probar, como la autonomía del dispositivo o el rendimiento de la cámara en otras condiciones diferentes, pero lo cierto es que, de momento, el Samsung Galaxy Z Flip me ha parecido una apuesta muy firme para este mercado premium de los móviles plegables, y más con este concepto que nos permite ahorrar espacio en el bolsillo, en lugar de llevar una tablet en este. Por el momento nos quedamos a la espera del análisis para contarte todo acerca del terminal.

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