Sony Xperia M4 Aqua y su almacenamiento, o cómo tomar el pelo con una broma de mal gusto
Normalmente, no solemos hacer críticas sobre la escasa memoria interna de algunos teléfonos, un problema con el que llevamos mucho tiempo lidiando, y que todavía en 2015 sigue presente. Sin embargo, hoy me he tomado la libertad de hacerlo con el nuevo Sony Xperia M4 Aqua que ya hemos analizado en profundidad. Y lo hago porque a una compañía que acaba de empezar en esto de los smartphones se le puede perdonar, pero señores, estamos hablando de una empresa que tiene tanta experiencia a sus espaldas como la que más.
Incluso se podría hacer la vista gorda si estuviésemos hablando de un teléfono muy económico, de no más de 150 euros. Pero no, tampoco es el caso. El Sony Xperia M4 Aqua tiene un precio oficial de 299 euros. 299 euros por 1,26 GB de memoria interna.
Nos ponemos en situación
Una vez más, Sony ha decidido (sí, digo decidido porque llegados a este punto, esto es una decisión muy consensuada) meterle una puñalada a la experiencia, olvidarse de los palos que ya se han llevado en más de una ocasión muchas compañías, y volver a tropezar en la misma piedra, sin ninguna aparente intención de sortearla. Resulta que vamos a la tienda tan tranquilos, nos compramos un Sony Xperia M4 Aqua de 8 GB, y cuando llegamos a casa, empezamos a configurarlo.
Las apps preinstaladas empiezan a actualizarse, y cuando acaba el proceso, ¡sorpresa!, esos 8 GB de memoria se han quedado en 1,26 GB y todavía no hemos instalado ni la primera de nuestras apps. Por supuesto, en nuestra review se llevó un punto negativo por esto, y dicho sea de paso, fue el único.
Una rectificación tarde, mal y a rastras
Tales han sido las críticas, que la compañía se ha visto obligada a reaccionar, algo que desde luego no es habitual. Como bien informaban desde Xperia Blog, la compañía ha tenido la amabilidad de molestarse en modificar el "white paper" del terminal, vamos, el típico librillo de toda la vida en el que debería recogerse toda la información útil del terminal. Antes de esta modificación, en el apartado de la memoria solo se indicaba que en la variante de 8 GB del Sony Xperia M4 Aqua quedaban 3 GB libres para el usuario, lo cual, evidentemente, es falso. Así ha quedado ahora esa parte del documento:
Como vemos, se ha añadido la aclaración "before you update preloaded applications". Es decir, que ahora nos dejan claro que esos 3 GB no son tales, puesto que como decíamos, al actualizar las aplicaciones instaladas en el sistema del terminal, la cantidad se reduce a menos de 2 GB.
"No importa, tiene slot para microSD"
Craso error el pensar en el slot microSD como la solución a todos nuestros problemas de almacenamiento. Es cierto que el poder ampliar la memoria aporta un gran plus pero, ¿de qué nos sirve cuando todavía hay muchas aplicaciones que no pueden ser movidas a la memoria externa de una forma sencilla para cualquier usuario?
Uno de los casos más flagrantes es sin duda el de la aplicación de Facebook, de la que sin ir más lejos hablábamos esta misma semana. Se trata de una app que entre otros recursos, consume muchísima memoria de almacenamiento, pues pesa unos 200 MB, una cifra que puede parecer baja si tenemos terminales sobrados de memoria, pero que en casos como el del Sony Xperia M4 Aqua y sus poco más de 1 GB libres, acaba convirtiéndose en un auténtico calvario para el usuario.
El resultado en estos casos siempre acaba siendo el de hacer malabares con la poca memoria que tenemos y reorganizar nuestras aplicaciones frecuentemente, teniendo que decidir cuáles vamos a desinstalar y cuáles vamos a mantener, borrar cada poco tiempo la caché de algunas de esas apps, o eliminar o mover a la memoria externa otro tipo de archivos que se almacenan en la memoria interna del terminal.
También tenemos la posibilidad de rootear el terminal, para tener así total acceso al sistema y eliminar aplicaciones que están ocupando esa memoria, y que sin root no se pueden eliminar. Pero lógicamente, esto es algo que la mayoría de usuarios no estarán dispuestos a hacer por diferentes motivos.
Hay cosas que no cambian
Sabemos que Sony no es la única, ni mucho menos, que acostumbra a este tipo de prácticas. Pero volvemos a repetir que estamos en 2015, que se trata de una compañía que se supone muy experimentada, y que hablamos de un smartphone de 300 euros. Simplemente es injusto que el usuario tenga prácticamente el 90% de memoria menos de la que en realidad está pagando, y es algo que irremediablemente empaña todas las bondades del terminal, que son muchas.
Desde luego, parece que hay cosas que no cambian...
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