"Nunca lo hubiera conseguido sin la IA": el caso de la mujer que ganó un juicio gracias a ChatGPT

En una llamativa, aunque también bastante arriesgada acción, una mujer californiana ha logrado ganar un juicio representándose a sí misma tras haberse documentado para ello a través de la Inteligencia Artificial. Gracias a dicha victoria judicial, pudo evitar ser desahuciada de su casa después de que la IA detectase incongruencias en su orden de desalojo, la cual pudo ser inhabilitada en un juicio.

Un juicio en el que le salvó la IA

Este caso que ha tenido lugar en Estados Unidos, y del que la CNBC se ha hecho eco, muestra el llamativo caso de Lynn White, una inquilina que se estaba atrasando en sus pagos de alquiler y que, de una manera arbitraria y que no cumplía con las normas establecidas, recibió una orden de desahucio. Perdió el juicio y la mujer estadounidense estaba a punto de quedarse en la calle.

Sin embargo, tomó la decisión de realizar a cabo consultas a la Inteligencia Artificial. Documentándose a través de ChatGPT y la IA de Perplexity, White descubrió que existían incongruencias en su sentencia respecto a la normativa de California, por lo que decidió recurrir la sentencia representándose a sí misma, y consiguió vencer en el juicio y evitar más de 50.000 dólares de multa, además de recuperar el derecho a seguir en su vivienda.

Puede salir bien, pero también terriblemente mal

Aunque en el caso de esta mujer el resultado le fue favorable y fue capaz de ganar un juicio representándose a sí misma, la realidad es que dicha acción conlleva muchos riesgos. El primero de ellos, una persona representándose a sí misma puede contar con mucha menos capacidad que un letrado, sea contratado o de oficio, para obtener un juicio favorable. El segundo de ellos, la Inteligencia Artificial puede "alucinar" y mezclar leyes de otros estados, países o regiones, invalidando por completo las bases de tu acusación o defensa.

Por tanto, lo más recomendable, aunque en casos particulares pueda darse con éxito, es contactar con profesionales que lleven a cabo tu defensa, tu presentación de recursos y, en general, tu representación jurídica. Hay errores, de hecho, que no solo te harían perder un juicio, sino incluso podrían empeorar tu situación, por lo que lo mejor es apoyarse siempre en especialistas.