La Comisión Europea quiere que todos los cargadores sean iguales para todos los móviles

La Comisión Europea quiere que todos los cargadores sean iguales para todos los móviles

Hay quien dice que se puede medir la edad de una persona por la cantidad de cargadores de Nokia que tiene en su casa, y puede que no le falte razón. Hasta hace no tantos años, cambiar de móvil era toda una odisea porque eso implicaba recibir un nuevo cargador con un nuevo cable que, posiblemente, no fuese compatible con tu anterior dispositivo. Eso redundaba en más cables metidos en un cajón que, con casi total seguridad, acabarían tirados a la basura --que no reciclados--. Mucho ha llovido desde entonces, y este tema ha mejorado bastante, aunque sigue teniendo margen de mejora.

En la actualidad, y siempre en el terreno de los smartphones, tenemos varios tipos de cargadores: microUSB, USB tipo C y Lightning. Si te compras un iPhone no puedes usar ninguno de los otros dos. Si te compras un gama alta de 2018, posiblemente no puedas usar tu cargador microUSB de toda la vida, mucho menos un Lighting. Así podríamos seguir hasta cansarnos. ¿Por qué? Porque no hay un estándar único para todos los móviles. Cada marca es libre de implementar el sistema que considere oportuno, y la Comisión Europea (CE) quiere poner punto y final.

Como recogen en PortalTIC, la Comisión Europea ha encargado un estudio para averiguar los posibles costes y beneficios de la implementación de un cargador único. En la actualidad, los cargadores desechados generan 51.000 toneladas de residuos electrónicos, una cantidad que crece tres veces más rápido que los residuos sólidos urbanos. Dichos residuos cuentan con materiales tóxicos y perjudiciales para el medioambiente, como el cadmio, el óxido de plomo o el mercurio, entre muchos otros.

La Comisión Europea quiere que todos los cargadores sean iguales para todos los móviles

La CE lleva 10 años intentando atajar este problema sin obtener ningún resultado. Las marcas no se ponen de acuerdo sobre qué sistema es mejor y, en palabras de Margrethe Vestager, comisaria europea de Competencia, el "progreso insatisfactorio con la aproximación voluntaria" (es decir, la falta de diligencia por parte de los fabricantes), junto a las quejas de los usuarios, ha desembocado en el desarrollo de este estudio. La Comisión Europea no puede obligar a los fabricantes a cambiar su cargador en todo el mundo, pero sí puede convertir la implementación de este estándar en una condición sine qua non para comercializar sus productos en los países europeos.

De confirmarse los beneficios de un cargador único, todas y cada una de las marcas deberían adoptarlo. Para que te hagas una idea, si se decide que el estándar sea el USB tipo C, Apple debería sacrificar su conector Lightning e implementar esta conexión en los iPhone europeos (no necesariamente en los americanos), algo que ya se ha barajado en alguna ocasión. No sabemos cuándo tendremos los resultados, pero estaremos atentos.

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