Por qué lanzar un móvil con un "notch clásico" es una terrible idea en 2019

El notch ha sido uno de los elementos de diseño más polémicos en los últimos años, o lo amas porque permite que veas más pantalla en la frontal de tu dispositivo, o bien lo odias debido a su forma y al hecho de que no deja ver las notificaciones que van llegando a la barra por su gran anchura.

Aunque, lo cierto es que este 2019 estamos viendo cada vez más terminales con notch de gota, o que al menos reducen el tamaño que ocupan para que podamos aprovechar más la pantalla. Y hoy te vamos a contar por qué un smartphone con notch clásico en 2019 es una idea terrible.

Por qué un móvil con notch es lo pero que puedes comprar ahora mismo

El notch nació como un método para alojar la cámara y los sensores en la parte frontal de un smartphone, pero haciendo que la pantalla aproveche el máximo espacio posible en la misma, lo cual --en teoría-- nos proporcionaba una mayor sensación de inmersión. Y en parte, esto ha sido así.

Sin embargo, ha llovido mucho desde el polémico notch del iPhone X que otros móviles Android han incorporado, como por ejemplo el Xiaomi Mi 8 o el Pocophone, y lo cierto es que, si bien en iOS, este no entorpecía ninguna función, en Android sí. Sin ir más lejos, con las notificaciones, ya que el espacio que queda para disponer los iconos en la barra es mínimo, y, de hecho, en algunos terminales, no nos enteraremos de que nos ha llegado un mensaje hasta que deslicemos para abrir la cortina de notificaciones.

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Ahora mismo nos encontramos en un momento en el que este tipo de notch clásico sólo tiene sentido en una ocasión: si aloja un sensor de reconocimiento facial 3D. Es decir, en caso del iPhone, algo que podemos entender debido a toda la tecnología que este debe albergar. Aunque, lo cierto es que seguramente Apple esté buscando un método para poder eliminar esta muesca y aprovechar el máximo de pantalla posible de cara a sus próximos terminales.

Sin embargo, en terminales Android en los que en la frontal sólo encontramos la cámara y el sensor de proximidad, en pleno 2019, contar con un notch que ocupe tanto como el de los terminales de Apple es un sinsentido, tanto a nivel estético como de aprovechamiento.

Por suerte, muchos fabricantes como Samsung con su Galaxy A50 y su notch de gota, su Galaxy S10 con agujero en pantalla o OnePlus con la cámara desplegable del OnePlus 7 o el notch reducido del OnePlus 6 consiguen unos muy buenos resultados dándole una vuelta de tuerca a la concepción inicial del notch.

Y precisamente, considero que el futuro del diseño de los smartphones pasa por esto: buscar alternativas cómodas y que no minoren las características del terminal para poder contar con una frontal con cada vez más pantalla, utilizando el espacio estrictamente necesario para los sensores, la cámara frontal y el altavoz para las llamadas.

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