Un ex-ejecutivo de Microsoft revela por qué Windows Phone fracasó
Otrora pionero en esto de los teléfonos inteligentes, lo cierto es que Microsoft nunca supo adaptar la experiencia de sus populares PDAs con Windows Mobile -en su época casi consideradas ordenadores de bolsillo- a la revolución smartphone que nos trajeron iOS y Android cambiando totalmente el concepto de lo que entendíamos por un teléfono inteligente.
No se rindió pronto Microsoft, que estuvo más de 15 años dándole vueltas a un sistema operativo móvil que nunca terminó de arrancar, y que por supuesto nunca pudo competir de forma seria con iOS y Android, los dos ogros de la industria que se comieron por el camino a todas las opciones que han ido surgiendo: Windows Phone, Firefox OS, Sailfish OS, etcétera.
En su día, cuando Microsoft anunció que descontinuaba su proyecto Windows Phone para centrarse en llevar sus apps más populares a las plataformas más utilizadas, todos los medios hablaron de la crónica de una muerte anunciada, y aunque mucho se ha escrito sobre el tema hoy tenemos una voz autorizada, la de un antiguo ejecutivo de Microsoft, que tal y como nos contaban los compañeros de GizChina ha desgranado las claves del fracaso de Windows Phone en una entrevista reciente.
Microsoft y su OS móvil, los cuatro motivos de un fracaso esperado
Seguramente el primero y más importante es que Microsoft no acertó con la evolución de Windows ni siquiera en versiones de PC hasta la llegada de Windows 10, y si Windows 8 fue un tremendo fail en versiones de escritorio, lo cierto es que a pesar de tratarse de sistemas diferentes para dispositivos diferentes, la mala crítica se arrastró a un Windows Phone 8 que nació con el pie cambiado en un mercado ya escéptico con Microsoft.
De hecho, el segundo motivo que nos comentaba este ex-ejecutivo de la compañía norteamericana es precisamente esa mala reputación de Microsoft, que cansó a sus usuarios con múltiples promesas incumplidas forzando a muchos a moverse a iOS y Android.
Otro de los puntos más diferenciales es que Microsoft subestimó además la capacidad de Google y Android para convencer al gran público en un escenario donde Apple se llevaba a los usuarios más fieles, mientras que el sistema operativo del androide prometía pero se mostraba todavía verde y con necesidad de recorrido.
Desde Microsoft no pensaron que Android mejoraría y crecería tan rápido, por lo que creyeron que tenían tiempo para adaptarse al cambio de paradigma. Sin embargo, el valor real de Android no está en Android sino en los servicios que Google ofrece sobre él, y tanto YouTube como Maps o Gmail sí tenían una base sólida de usuarios que ayudó a hacer crecer rápidamente la plataforma Android.
Y quizás por esto, la conclusión es que Microsoft llegó demasiado tarde a un mercado donde los usuarios de iOS y Android ya estaban satisfechos, con funcionalidades avanzadas y promesas de mejora que no implicaban razones convincentes para que los consumidores pensasen en moverse a un Windows Phone que siempre pareció estar en pañales a pesar del gran peso de la marca Nokia.
Sea como fuere, la única verdad es que Microsoft no acertó con Windows Phone, y nunca llegó a ponernos difícil la elección a nosotros, los usuarios, que hemos favorecido esta bicefalia entre los sistemas operativos móviles. Y vosotros, ¿daríais la oportunidad a un nuevo sistema operativo si llegase con mejoras importantes, o seguiríais confiando en Android?
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