El iPhone más caro del mundo: un modelo de 2007 sin desprecintar se dispara en subasta

Los iPhone han sido siempre un modelo de teléfono que ha marcado tendencia, incluso desde sus albores. El primer iPhone, de hecho, destaca precisamente por ser uno de los dispositivos que pavimentó el mercado de los smartphones que conocemos hoy en día. Y ahora, 18 años después de la primera generación de smartphones de Apple, ha salido una subasta de este teléfono que, por razones más que obvias, está alcanzando unas pujas de valor estratosférico.

Un iPhone de primera generación

Este iPhone original y de primera generación, que se encuentra disponible en la web de subastas PR Auction totalmente nuevo y aún precintado, es así uno de los teléfonos capaces de batir récords en su valor de venta final. A 16 de marzo, de hecho, este teléfono ya se encuentra rondando los 31.000 dólares de puja, y con una subasta que se mantendrá activa hasta el próximo 21 de marzo, no cabe duda de que el precio puede subir todavía muchísimo más, especialmente cuando las mayores subidas tienen lugar al final de la misma.

El iPhone original, el modelo que en 2007 mostró por primera vez Steve Jobs para revolucionar para siempre la industria telefónica, es un móvil que a día de hoy está muy lejos de los estándares básicos que le pedimos a un dispositivo actual, puesto que solo tiene 4GB de almacenamiento (aunque en aquella época podía considerarse algo razonable) y el rendimiento de procesadores y batería no tiene nada que ver con el que alcanza la tecnología iOS de hoy en día. Sin embargo, fue el primer iPhone, y uno de los padres del mercado de smartphones actual.

El origen de los smartphones

No cabe duda de lo importante que es valorar el primer iPhone y su relevancia en el mundo de la telefonía. Hasta entonces, el paradigma vigente era de móviles cada vez más pequeños, pantallas más pequeñas, y con funcionalidades únicamente centradas en llamadas, mensajes SMS y, como mucho, en fotografías con cámaras de resoluciones bastante humildes. Sin embargo, el iPhone supuso tal puñetazo en la mesa de la industria que se convirtió en un punto de inflexión en el que los móviles pasarían a ser ordenadores de bolsillo.

Ahora, 18 años después, tenemos una industria de móviles inteligentes más que asentada. De hecho, el número de pantallas móviles multiplica al de ordenadores, lo que hace que la navegación a través de Internet, hoy en día, se lleve a cabo de manera mayoritaria a través de las pantallas de un teléfono, muy por encima de los monitores de ordenador, y también por encima del mercado de tablets, un nicho que nunca se ha extendido del mismo modo que los smartphones.