Google Pixel XL vs iPhone 7 Plus, comparativa a fondo entre lo mejor de cada casa
El pasado mes de octubre, Google entraba en el sector de la telefonía por todo lo alto lanzando los Google Pixel y Pixel XL, sus dos primeros terminales diseñados y desarrollados sin ayuda de otras compañías, con el principal objetivo de luchar de tú a tú con los terminales más top de la telefonía móvil actual.
Algo similar lleva haciendo Apple desde que, en 2007, Steve Jobs anunciara el iPhone original, desarrollado íntegramente por los de Cupertino, con un hardware y software a medida, que permite que todo funcione a las mil maravillas.
Ahora que Google ya cuenta con un exponente propio capaz de plantar cara al iPhone de Apple --que ya pudimos probar a fondo en su momento--, hemos decidido enfrentar los dos smartphones de mayor tamaño de estas dos gigantes tecnológicas, y ver cuál de las dos se ha acercado más a la perfección. Sin más dilación, pasamos a comparar a fondo el Google Pixel XL y el Apple iPhone 7 Plus.
Google Pixel XL vs iPhone 7 Plus, comparativa
Después de casi una década siendo rivales en cuanto a sistemas operativos móviles, ahora, Apple y Google se enfrentarán en materia de hardware con sus dos últimas creaciones. Sí, es cierto que a día de hoy han sido presentados, e incluso lanzados al mercado, dispositivos más avanzados que los Pixel XL y iPhone 7 Plus. Aún así, estos dos son los principales exponentes las dos plataformas móviles más utilizadas en todo el mundo.
Diseño
Ya te vamos avisando: ni el Pixel XL ni el iPhone 7 Plus tienen el diseño más innovador del mercado. Por su parte, el primogénito de Google cuenta con un cuerpo fabricado en aluminio, con un diseño ligeramente redondeado que sienta realmente bien a la mano.
El principal "defecto", por llamarlo de alguna manera, nos lo encontramos en la parte trasera, en el panel de cristal que rodea al lector de huellas y a la cámara. Ya sé que sobre gustos no hay nada escrito, pero el cambio de color que supone este panel de cristal con respecto al aluminio, hace que la elegancia del dispositivo desaparezca casi por completo en cuanto le damos la vuelta.
Por su parte, el iPhone 7 Plus mantiene un diseño continuista con respecto a las anteriores generaciones, con un cuerpo fabricado en aluminio anodizado, y una curvatura lateral que rodea todo el chasis del terminal, y que ofrece una genial sensación a la hora de tener el terminal en la mano, a pesar de su gran tamaño.
Pero hay un aspecto en el que ambas marcas deben mejorar, y mucho. Los marcos de pantalla superior e inferior son exageradamente grandes en ambos casos. Sí, el iPhone tiene un lector de huellas frontal que puede servir de excusa --aunque 4 años con el mismo diseño deberían haber servido para lograr cierta evolución--, pero la parte frontal del Google Pixel no es digna de un terminal de más de 750 euros. Sea como sea, las dos compañías deben tomar nota de firmas como Xiaomi, Samsung o LG para sus próximas creaciones, pues, tarde o temprano, los marcos de pantalla ultrarreducidos comenzarán a ser un estándar en la telefonía móvil.
Pantalla
Las dos gigantes estadounidenses han apostado por el mismo diagonal de pantalla para sus phablets: 5,5 pulgadas. Pero lo cierto es que esta es la única similitud que encontramos entre sus paneles.
Mientras que el Pixel XL de Google apuesta por una resolución QuadHD que arroja una cantidad de píxeles de 1440 x 2560 y 534 ppi. También es diferente la tecnología utilizada, siendo en este caso un panel AMOLED, que ofrece unos colores vivos y saturados, una nitidez y cantidad de detalle excepcionales, y unos ángulos de visión más que correctos. Por no hablar de los negros totalmente puros que ofrece una pantalla de estas características.
Apple, por su parte, se mantiene en su línea de paneles con resoluciones "reducidas" con respecto a sus rivales, y el iPhone 7 Plus hace uso de una pantalla IPS con resolución FullHD de 1080x1920 puntos, y 401 píxeles por pulgada. Como es costumbre en los de Cupertino, estamos ante un panel de muy buena calidad, que ofrece unos colores algo más acertados que su rival.
Sobre el papel, sería fácil proclamar al Google Pixel XL ganador en este aspecto. Y así es: la gran G ha decidido apostar por una tecnología AMOLED que a día de hoy se encuentra libre de los problemas de antaño, y que ofrece un resultado espectacular en todos los sentidos. Si bien la pantalla del iPhone es una de las mejores que encontramos en el mercado a día de hoy, el Pixel XL se sitúa un escalón por encima gracias a la tecnología utilizada. De hecho, Apple ya ha manifestado sus intenciones de introducir un panel OLED en su próximo terminal.
Fotografía
Quién nos iba a decir a nosotros en 2007, cuando el primer iPhone fue presentado, o en 2008, cuando Android vio la luz por primera vez, que los smartphones lograrían ponerse a la altura de las cámaras de fotos compactas. Sin embargo, aquí estamos, comparando dos de los mejores exponentes en cuanto a fotografía móvil disponibles en el mercado, capaces de ofrecer resultados espectaculares incluso en manos inexpertas.
El Google Pixel XL integra un sensor de 12,3 megapíxeles con apertura f/2.0. ¿Sobre el papel? Una cámara normal, ¿el resultado? la mejor experiencia fotográfica que hemos podido disfrutar hasta el momento en un teléfono móvil. Sin más.
Más luz en condiciones de buena iluminación, unos colores más vivos y una cantidad de detalle superior, son solo algunos de los muchos aspectos que nos han enamorado del sensor fotográfico del terminal de Google, y que nos hacen decantarnos por la cámara del Pixel XL por encima de la del iPhone 7 Plus.
¿Y de noche? Más de lo mismo: el Google Pixel es capaz de captar más luz gracias a su modo HDR+, lo cual se traduce en imágenes con menos ruido y un mayor realismo a la vez que se mejora la iluminación de las fotografías.
Donde deberíamos notar una diferencia a favor del iPhone 7 Plus es a la hora de realizar zoom, gracias a que el terminal de Apple cuenta con un doble sensor de 12 megapíxeles. Sí, el modo retrato permite capturar imágenes con un efecto de desenfoque muy bien conseguido; por lo demás, la cámara del Google Pixel es capaz de ofrecer un resultado similar, e incluso por encima que el de su rival a la hora de ampliar las fotografías.
Vídeo
Aunque Apple siempre ha logrado reinar en este aspecto, Google se ha esforzado al máximo por ofrecer una grabación de vídeo a la altura de su principal competidor.
Aún sin integrar un estabilizador óptico, el Google Pixel es capaz de grabar vídeo con una estabilidad asombrosa, que en ocasiones incluso puede parecer demasiado artificial. En este caso, nos vemos obligados a determinar un empate entre ambos dispositivos.
Rendimiento y batería
Siempre es difícil comparar terminales de diferentes plataformas en cuanto a rendimiento. Los dos smartphones cuentan con un hardware completamente diferente, y, como es evidente, un software que no tiene nada que ver.
En el caso del Pixel XL de Google nos encontramos con un procesador Qualcomm Snapdragon 821 a 2,35 GHz acompañado de 4 GB de memoria RAM , y Android 7.1 Nougat en su edición más pura. Por su parte, el iPhone 7 Plus estrena iOS 10, con un procesador Apple A10 Fusion a 2,34 GHz junto a 3 GB de RAM.
En cuanto a fluidez y rendimiento, nos cuesta encontrar un claro ganador: ambos son capaces de abrir aplicaciones con una rapidez pasmosa, quizá el Pixel XL sea capaz de cargar antes la información, aunque es posible que se deba a una mayor velocidad de las animaciones, aspecto en el que iOS se muestra algo más fluido, más aún tras la reciente actualización a iOS 10.3, que ofrece mejoras en este ámbito.
A la hora de recurrir a las aplicaciones en segundo plano, almacenadas en la memoria RAM, iOS se muestra algo más ágil que la versión de Android incluida en el Google Pixel XL. De nuevo, la diferencia es mínima, aunque es una prueba más de que la gestión de la memoria en el sistema opeartivo de Google aún tiene margen de mejora por delante.
Llegamos a un aspecto decisivo como lo es el de la batería: 3.400 mAh del Google Pixel XL, enfrentados con los 2.900 mAh del iPhone 7 Plus. Sobre el papel la diferencia es clara, y en el día a día, también.
El smartphone de Google nos ofrece una duración notablemente por encima del iPhone en la mayoría de situaciones. Por si fuera poco, además, el Google Pixel cuenta con un sistema de carga rápida que nos ofrece un 50% de batería con tan solo 30 minutos de carga,. Por su parte, el iPhone 7 Plus, simplemente, carece de carga rápida de cualquier tipo.
Conclusiones
Ambos terminales tienen sus pros y sus contras. En general, el Google Pixel XL sale vencedor por mantener la compostura en aspectos clave, donde el iPhone 7 Plus queda ligeramente por debajo. Sin duda, este resultado es digno de admirar teniendo en cuenta que el Pixel XL es el primer terminal desarrollado completamente por Google, mientras que el iPhone se encuentra ya en su décima generación.
Claro que, esto no quita que Google tenga aún mucho camino por recorrer si pretende situarse en lo más alto de la telefonía móvil. Sea como sea, si han logrado conseguir este resultado con su primer terminal, no podemos imaginar lo que será capaz de alcanzar la gran G en la próxima generación de los Pixel, que se verán las caras con el iPhone 8, iPhone X, o como sea que se llame. ¿Soy el único que espera impaciente ese momento?
Y tú, ¿con cuál te quedas?
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