Así funciona la caja desbloqueadora de iPhones que usa la policía estadounidense

Así funciona la caja desbloqueadora de iPhones que usa la policía estadounidense

A día de hoy todos nos sentimos a salvo usando nuestro smartphone gracias a los bloqueos de seguridad. Aquí, el que más y el que menos, tiene bloqueado su terminal con la huella dactilar y un patrón de puntos / contraseña que, al menos en teoría, son sistemas que deberían protegernos de miradas y manos ajenas, pero nada más lejos de la realidad. El ejemplo más evidente lo tenemos en el iPhone, que no es que sea menos seguro que un Android, porque no lo es, pero sirve para ilustrar lo extremadamente vulnerables que nuestros dispositivos son en realidad.

El iPhone ha sido protagonista de muchas polémicas relacionadas con la privacidad, y las diferentes agencias de seguridad han invertido ingentes cantidades de dinero para poder hackearlos y acceder a su interior. Posiblemente te suena el caso del iPhone del terrorista que tanta atención genero en la primera mitad de 2017. El FBI pagó 900.000 dólares para hacerse con la herramienta necesaria para poder descifrar su código PIN. Hoy parece que ese coste se ha abaratado enormemente, y la culpable se llama Grayshift.

Hackea tu iPhone por el módico precio de 15.000 dólares gracias a Grayshift

GrayKey foto real

Grayshift es, como apuntan desde Motherboard, una startup estodounidense entre cuya plantilla se encuentra un ex ingeniero de seguridad de Apple. Ya sabes por dónde van los tiros, ¿verdad? Dicha startup se dedica a proporcionar herramientas de desbloqueo de iPhone a los cuerpos de seguridad, herramientas que tienen forma de caja y que han sido bautizadas como GrayKey.

Las GrayKey miden 10 x 10 centímetros y cuentan con dos cables Lightning en la parte delantera. Solo funcionan con iOS 10 y 11 --lo que no es un problema teniendo en cuenta la tasa de adopción de iOS en todo el mundo-- y con todos los dispositivos Apple que vayan desde el iPhone 6 hasta el iPhone X, al igual que varios modelos de iPad. Tarda entre dos horas y tres días en hackear la contraseña de un iPhone, dependiendo, obviamente, de la longitud de la misma. Una vez conseguida, todos los datos del iPhone se descargan en la GrayKey y se vuelven accesibles para la policía.

El coste de estas cajas varía en función de sus capacidades. La más económica cuesta 15.000 dólares, solo permite 300 usos y debe estar conectada a Internet. La más cara y funcional vale 30.000, pero funciona sin Internet y permite desbloquear tantos dispositivos como quieras. Sea como sea, es mucho más económico que el servicio israelí Cellebrite, que cobra 5.000 dólares por dispositivo desbloqueado.

Ya se está comercializando

Touch ID iPhone

Según la fuente, la policía del Estado de Maryland y de Indina ya han comprado una, y la Policía de Miami está planeando hacerlo. El Servicio Secreto planea comprar seis, y el Departamento de Estado ya se ha hecho con la tecnología. Esto abre la puerta a dos debates. Por un lado, ¿deben los cuerpos de seguridad tener acceso a este tipo de tecnología? ¿Dónde se pone la línea entre privacidad y seguridad, entre libertad individual y seguridad colectiva?

Por otro lado, ¿qué ocurre si GrayKey llega al mercado negro? ¿Y si cualquier persona puede acceder a los servicios de esta cajita de 10 cm de forma completamente ilegal? ¿Y si alguien hace ingeniería inversa, la copia y la "populariza"? Son preguntas que lanzo al aire y que te animo a responder más abajo.

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