El iPhone 8 podría costar más de 1000 dólares, ¿pasará lo mismo con el Galaxy S8?

El mercado de smartphones se está llenando cada vez más de nuevos fabricantes que apuestan por reducir al máximo sus costes de producción para ofrecer terminales extremadamente baratos y que cumplan con las expectativas de los usuarios más básicos. Por otra parte podemos encontrar una gama media se acerca mucho a la gama alta, y que nos posibilita mejorar con creces la experiencia que teníamos hace unos años con terminales de alrededor de 200 euros, que ahora dan un rendimiento más fluido.

Como consecuencia de esto, muchos fabricantes se están viendo obligados a innovar y a diferenciar sus smartphones para justificar el alto precio de un terminal de gama alta, frente a uno de gama media. Y esto, evidentemente, hace que se infle bastante el precio de sus móviles. Algo que previsiblemente pasará en el iPhone 8 y que hace que nos preguntemos si el Samsung Galaxy S8 seguirá este camino.

¿Seguirá el Samsung Galaxy S8 el camino marcado por Huawei?

Como puedes leer en iPadizate, es muy probable que el precio del futuro iPhone 8 supere la barrera de los 1.000 euros, una cifra que pocos fabricantes --como Huawei con su Mate 9 Porsche Design-- superan, y que cuando lo hacen, dicen que es debido al nivel de innovación con el que cuenta su dispositivo, algo que podría hacer también Samsung con su Galaxy S8, ya que según todos los rumores y las filtraciones que hemos tenido hasta el día de la fecha, va a ser el Samsung más diferente que vamos a poder encontrar.

Entre todas las características que se le han atribuido, la más polémica es el diseño, del cual se ha dicho que podría eliminar los botones en los marcos para dejar más sitio a la pantalla, la cual podría ocupar la mayor parte del frontal. Esto es una nueva tendencia que, de momento, ha llegado a su máxima expresión con el Xiaomi Mi Mix, terminal que también ha inflado su precio debido a esta implementación, y que flojea en otros apartados como la cámara, a pesar de su gran precio.

Sin embargo, desde hace un par de años, el tope de gama de Samsung prácticamente no cojea en ningún apartado, ya que encontramos una cámara increible, una pantalla en el top 3 del mercado y una batería y potencias muy buenas, dejando como único punto negativo --a mi juicio-- TouchWiz, que a pesar de sus cambios estéticos sigue empobreciendo la experiencia con el terminal. Por lo tanto, si el terminal llegara a semejante precio, la comañía coreana tendría bases sólidas donde apoyarse para justificarlo.

Esto me lleva a pensar que si se confirman ciertos rumores como que Samsung añada unos auriculares inalámbricos, o la incorporación del S-Pen, el nuevo asistente virtual de la compañía --que rivalizará con Google Now y Google Assistant--, o la nueva función de software para contar con una segunda pantalla --simillar a la que incorpora el LG V20--, Samsung tendría la perfecta excusa para llevar a cabo este incremento de precio, aunque no creo que esta llegue a superar los mil euros, al menos en las versiones con menos capacidad de los terminales

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