Google sorprende con el Pixel Watch 4: iFixit lo llama “el reloj más fácil de reparar de la historia”
El Pixel Watch 4 logra un 9/10 en reparabilidad gracias a su diseño interno con tornillos y piezas fácilmente reemplazables, según iFixit

Google no solo quiere competir con Apple en diseño o funciones, también parece estar dispuesto a marcar la diferencia en un terreno en el que los relojes inteligentes siempre han estado en deuda: la reparabilidad. El nuevo Pixel Watch 4, el cual fue presentado junto a la familia Pixel 10, acaba de recibir un título inesperado de la mano de iFixit, la famosa web de desmontajes: “el smartwatch más fácil de reparar de la historia”.
Un diseño pensado para abrirse
El secreto está en que Google ha replanteado por completo la arquitectura interna del dispositivo. Mientras que otros relojes recurren a adhesivos que complican cualquier intento de reparación, el Pixel Watch 4 apuesta por tornillos y un sistema de bisagra interna que permiten acceder fácilmente a sus componentes.
Detalles como el motor de vibración, fijado con tornillos y conectado mediante pequeños pines, o la batería, que se puede reemplazar en cuestión de minutos, demuestra que aquí la prioridad no ha sido solo compactar, sino también facilitar el mantenimiento.
Incluso la pantalla utiliza una junta de goma (O-ring) en lugar de pegamento, lo que garantiza resistencia al agua y polvo con certificación IP68 y, al mismo tiempo, la posibilidad de cambiarla sin complicaciones.
Una rareza en el mundillo de los wearables
El resultado de este diseño se traduce en un 9 sobre 10 en el índice de reparabilidad de iFixit, una puntación que hasta ahora parecía reservada a dispositivos mucho más grandes.
En un sector donde abrir un reloj suele ser sinónimo de desastre, el Pixel Watch 4 de Google rompe moldes al demostrar que tamaño y facilidad de reparación no tienen por qué estar reñidos.
El veredicto final de iFixit es claro: el Pixel Watch 4 “se siente construido para ser reparado”. Una frase que, más allá de lo anecdótico, refleja un cambio de mentalidad en Google y una respuesta a la creciente demanda de dispositivos más sostenibles.
Puede que no sea el smartwatch más avanzado del mercado, pero sí es, al menos por ahora, el más fácil de reparar. En definitiva, esto lo convierte en un producto único que podría marcar el inicio de una revolución en lo que a reparabilidad de relojes inteligentes respecta.