El mítico Volkswagen Polo se reinventa en versión 100% eléctrica
El nuevo ID. Polo se fabricará en Martorell, promete hasta 450 km de autonomía y busca ser el eléctrico del pueblo desde 25.000 euros
El Volkswagen Polo no desaparece, se electrifica. La marca ha confirmado que su utilitario histórico volverá en 2026 convertido en el ID. Polo, un modelo 100% eléctrico fabricado en Martorell que promete salir al mercado desde 25.000 euros. La idea es sencilla: usar el nombre de toda la vida para intentar que el coche a pilas sea, por fin, una opción de compra masiva.
Para conseguir ese precio sin perder dinero, el coche estrena la plataforma MEB+ de tracción delantera. Es un cambio técnico importante respecto a los primeros ID: al poner el motor delante y quitar la propulsión trasera, el fabricante ahorra costes y libera espacio en la parte posterior, solucionando de un plumazo dos de las grandes pegas que tenían los eléctricos compactos del grupo hasta ahora.
Baterías para ciudad o para viajar, tú eliges




La versión base de los 25.000 euros montará una batería LFP de 37 kWh, suficiente para unos 300 km y pensada estrictamente para uso urbano. Si quieres salir a carretera con garantías, tendrás que pagar el extra por la batería de 52 kWh, que promete acercarse a los 450 km de autonomía gracias a unas nuevas celdas unificadas que ocupan menos y pesan poco.
Bajo el capó llevaremos el nuevo motor APP 290, mucho más pequeño y eficiente. Habrá potencia de sobra para un coche de este tamaño: la gama arranca en 116 CV y escalará hasta los 226 CV de la futura versión GTI. Sí, habrá un Polo eléctrico deportivo, aunque está por ver si logra transmitir las mismas sensaciones al volante que el modelo de gasolina.
El precio suena bien, pero tiene matices. 25.000 euros es el precio de salida y para 2026 el mercado habrá cambiado mucho. A día de hoy, jugando con las ayudas, ya es posible comprar un Tesla Model 3 por un precio similar, así que este Polo tendrá que ofrecer unos acabados impecables si no quiere que la competencia se le coma la tostada. Para reforzar la oferta, este modelo llegará junto a otras opciones, como el SUV económico que anunciaron hace poco, intentando cubrir todos los gustos del segmento de acceso.
Donde sí gana por goleada es en el espacio. Al ser eléctrico nativo, mantiene el tamaño exterior contenido de siempre para aparcar fácil, pero es mucho más amplio por dentro. El maletero crece hasta los 435 litros, superando holgadamente los 351 litros del modelo actual de combustión, lo que lo convierte en un coche mucho más práctico para cargar la compra o el equipaje.
En el interior no faltará tecnología. Incluye el nuevo Travel Assist, capaz de mantenerte en el carril y reconocer semáforos o señales de Stop. Es un buen añadido para el tráfico diario, siempre y cuando el software funcione fluido desde el primer día, algo que ha sido la asignatura pendiente de Volkswagen en sus últimos lanzamientos.
Al final, lo importante es que en 2026 tendremos una opción "made in Spain" con un nombre de confianza. Volkswagen se juega mucho con este lanzamiento, ya que necesita recuperar volumen de ventas urgentemente, aunque habrá que ver si para entonces la red de cargadores española está a la altura de este despliegue industrial.