Por qué la televisión coreana ha emitido una disculpa pública del vicepresidente de Samsung
Queda demostrado que la realidad siempre supera a la ficción, pues si creías que esa casa de los líos que es Waystar Royco en la serie Succession, de HBO, no podría existir en el MundoReal™, sólo tienes que echarle un vistazo al enorme globo de conspiraciones que rodea a la cúpula del gigante Samsung en las últimas semanas.
Y es que Samsung sí es un gigante, eso ya lo sabíamos, pero no es un cachalote cualquiera sino uno que puesto en contexto supone más del 15% del Producto Interior Bruto de Corea y más del 20% de sus exportaciones, una salvajada de conglomerado empresarial que ha puesto en jaque incluso las leyes sucesorias de Corea del Sur y tiene en vilo al país asiático, atentos todos a su discutible política sucesoria al frente de la compañía.
De cómo una compañía como Samsung mantiene una línea sucesoria casi monárquica, y los impuestos en Corea del Sur podrían hacerle perder el control a la familia de Lee Kun-hee
De hecho, es que existe incluso una conspiración muy loca que habla de la muerte del presidente de Samsung hace ya años, hecho que no se habría publicado ni habría trascendido en ningún caso por las terribles consecuencias económicas que Corea del Sur podría sufrir debido a las leyes e impuestos de sucesiones. Es este un tema que está sobre la mesa desde 2014, y su falta de resolución ha avivado los rumores sobre la salud de Lee Kun-hee.
Pero no os preocupéis si no estáis entendiendo nada porque os lo explicamos muy rápido, dicen las leyes de Corea del Sur que si una herencia supera los 2,5 millones de dólares, los herederos deben abonar el 50% de los bienes en impuestos a la Hacienda pública, cifra que puede alcanzar un 65% si los bienes son acciones y los herederos son accionistas mayoritarios de la compañía.
Precisamente esta es la situación de una Samsung enorme en cifras, que obligaría en caso de fallecimiento de Lee Kun-hee a que sus herederos directos abonasen aproximadamente 6.000 millones de dólares, teniendo que vender acciones de la empresa para afrontar el pago y poniendo así en riesgo su control, que podría recaer en fondos de inversiones extranjeros o especuladores varios.
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El vicepresidente de Samsung, jefe de facto, pide disculpas públicamente
La situación es bastante curiosa y preocupante en Corea del Sur, como nos cuenta SamMobile, así que lejos de seguir especulando sobre la muerte o la hospitalización del presidente de Samsung, lo cierto es que Lee Jae-yong ha tenido que salir a la televisión pública surcoreana para pedir unas disculpas ya históricas, comparables al "Lo siento mucho. Me he equivocado. No volverá a ocurrir" de nuestro Rey Emérito en España.
Denominado por muchos medios como "el Príncipe Heredero de Samsung", Lee Jae-yong es vicepresidente de Samsung y su jefe de facto desde que su padre quedase supuestamente incapacitado por un ataque cardíaco en 2014, pero según él mismo ha prometido será el último líder en la línea sucesoria familiar de la compañía, discutible sin duda, desde la época de su abuelo Lee Byung-chul:
Samsung no ha cumplido estrictamente con todas las leyes y la ética, y tampoco hemos hecho lo suficiente para comunicarnos con la sociedad.
Lee Jae-yong, vicepresidente de Samsung
Televisada en directo desde Seúl, ha sido la primera aparición oficial de Lee Jae-yong en los medios en los últimos cinco años, y eso a pesar de que el vicepresidente de Samsung ha estado en la cárcel casi un año por cargos de corrupción, así como perjurio y malversación de fondos, por los que fue condenado a cinco años de prisión consiguiendo posteriormente la libertad condicional.
Promete ahora que no habrá más ilegalidades en Samsung, y lo hace públicamente después de que un comité independiente que supervisa el cumplimiento de la responsabilidad y la trasparencia corporativa de Samsung se lo solicitase como parte de los mencionados procesos judiciales. De hecho, haberse opuesto a la comparecencia podría haberle ocasionado una condena de hasta 50 años de cárcel.
Según afirma el propio Lee, hace tiempo que le daba vueltas a la idea de terminar con esta línea de sucesión al frente de Samsung, pero que nunca compartió sus intenciones públicamente por las consecuencias que podría tener. Dicen los partidarios de la conspiración que estas declaraciones son algo muy poco creíble.
Sobornos, corrupción, malversación de fondos, perjurio, implicaciones del gobierno surcoreano, ... La sucesión en Samsung es una cuestión de estado y sus oscuros movimientos han tenido de todo!
Lo que sí queda claro es que Lee Jae-yong trata desde 2014 de afianzarse como máximo mandatario de Samsung cumpliendo con una especie de destino marcado, llevando a la compañía a una reestructuración interna fusionando Cheil Industries y Samsung C&T, movimiento que le ayudó a consolidarse en su día a expensas del fondo de pensiones más grande de su país, uno de los principales inversores de Cheil.
En esa operación estuvo inmerso también el ex-presidente coreano Park Geun-hye, demostrando a base de sobornos y corrupción que la sucesión en Samsung es una cuestión de estado en Corea del Sur, algo que obviamente le llevó a la cárcel en un escándalo político de propociones bíblicas.
Veremos si las promesas se cumplen y no hay tratos ilegales en Samsung en el futuro, algo por lo que velarán el comité de cumplimiento y los equipos de responsabilidad corporativa del gigante surcoreano, que seguirán activos una vez finalicen los procesos judiciales abiertos contra Lee. Increíbles lo que se mueve en las grandes esferas, eh...!
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