Qualcomm presenta el chip SW6100 para Wear OS: apuesta de futuro fuerte por los relojes inteligentes
El SW6100 es el primer procesador que Qualcomm diseña específicamente para wearables, abandonando las adaptaciones de chips móviles que usaba hasta ahora

Después de años adaptando procesadores de smartphones para relojes inteligentes, Qualcomm ha confirmado su primer chip diseñado desde cero para Wear OS. El SW6100 marca el fin de una era en la que la compañía se limitaba a modificar chips existentes para wearables, una práctica que nunca terminaba de convencer del todo.
Tal y como ha revelado Android Authority, el SW6100 incorpora arquitectura ARM Cortex-A78 y A55, una combinación que promete acabar con la lentitud crónica de muchos smartwatches. Esta filtración llega después de que el Snapdragon Wear 3100 introdujera la arquitectura "Big-Small-Tiny" en 2018.
Un diseño integral que abandona las adaptaciones
El SW6100 rompe con la tradición de Qualcomm de reutilizar procesadores móviles. La configuración incluye un núcleo Cortex-A78 para tareas intensivas y cuatro núcleos Cortex-A55 para operaciones de bajo consumo. Vamos, que por fin han hecho un chip pensado para relojes de verdad.
Esto es bastante diferente a lo que hemos visto antes. Los anteriores Wear 4100 o W5 Gen 1 se basaban en chips como el Snapdragon 429 o QCS2290. El nuevo procesador también incorpora memoria más rápida, una mejora sustancial respecto al LPDDR4 del modelo W5 Gen 1. La fabricación correrá a cargo de TSMC, como suele se habitual en la firma. Qualcomm busca mayor eficiencia energética frente a los procesos de Samsung utilizados antes. El chip incluye además un coprocesador QCC6100, cuyos detalles específicos aún no se han revelado.
¿Y qué gana el usuario con todo esto? Pues principalmente dos cosas. Primero, aplicaciones que no se cuelguen cada dos por tres gracias a la arquitectura Cortex-A78/A55, que supera ampliamente a los antiguos Cortex-A53. Segundo, autonomía que no te obligue a cargar el reloj todos los días, que siempre viene bien en un smartwatch.
Samsung ya emplea una configuración similar en su Exynos W1000, utilizado en relojes como el Galaxy Watch 6. La diferencia es que Qualcomm busca un diseño más versátil para múltiples fabricantes, mientras Samsung se centra en su propio ecosistema.
Aunque no hay fecha oficial, se especula que el chip podría llegar a dispositivos en 2026, bajo nombres como W5 Gen 2 o W6 Gen 1. Esto daría tiempo a Google y fabricantes como Fossil o Mobvoi para integrarlo en nuevas generaciones de Wear OS, siguiendo el ejemplo del Xiaomi Watch 2 que incorporó el Snapdragon W5+ Gen 1.
La ausencia de núcleos RISC-V es curiosa, considerando que Qualcomm y Google anunciaron su colaboración para desarrollar procesadores basados en esta arquitectura. El SW6100 confirma que, de momento, se mantienen con arquitectura ARM debido a la madurez tecnológica superior. Para el sector de wearables, esto viene bien después del estancamiento posterior al lanzamiento del Snapdragon W5+ Gen 1 en 2022. El Pixel Watch 3 siguió usando el Snapdragon Wear 5100, poniendo de manifiesto que hacía falta algo nuevo.
El SW6100 no va a cambiar el mundo, pero sí es un paso adelante en un mercado que necesitaba renovación. Para usuarios, significa smartwatches más ágiles y eficientes, aunque quedan interrogantes sobre integración con Wear OS y estrategia de precios. Las respuestas llegarán en 2026, pero al menos ya sabemos por dónde van los tiros.