El robot 'culturista' ya ha llegado, es modular y tiene mucha fuerza
WIRobotics presenta un humanoide capaz de detectar fuerzas de 100 gramos y levantar 30 kilos con una precisión casi humana

Corea del Sur vuelve a sorprender en el mundo de la robótica. La empresa WIRobotics acaba de presentar ALLEX, un robot humanoide que va mucho más allá de los robots colaborativos que conocemos hasta ahora. Sus capacidades incluyen una sensibilidad y precisión que se acerca bastante a los movimientos humanos más delicados.
El medio Interesting Engineering recoge los detalles técnicos de este humanoide cuyo nombre significa "ALL-EXperience". ALLEX no solo ve su entorno y controla posiciones, sino que interpreta fuerzas físicas y reacciona de manera adaptable a estímulos como contacto, impactos o resistencias del ambiente.
Un diseño que va más allá de lo esperado
La mano robótica de ALLEX incorpora 15 grados de libertad que permiten movimientos muy suaves similares a los de una mano humana bien coordinada. Su capacidad de agarre va desde objetos extremadamente frágiles hasta cargas de 30 kilogramos, mientras detecta fuerzas tan sutiles como 100 gramos gracias a actuadores de ultra baja fricción.
A pesar de su potencia, el diseño busca ser ligero. El brazo completo pesa únicamente 700 gramos mientras el torso llega a los 5 kilos, mucho menos que robots industriales con capacidades similares. Esto hace que una sola mano pueda manejar cargas superiores a 3 kilogramos manteniendo la precisión.
La modularidad es otra característica destacada del proyecto surcoreano. WIRobotics diseñó ALLEX como una plataforma adaptable donde los usuarios pueden emplear solo el brazo, el torso completo o sistemas de control específicos según lo que necesiten en cada momento.
Las aplicaciones van desde servicios domésticos hasta investigación e implementaciones industriales. Robots como el Unitree R1 ya muestran que tener un robot humanoide en casa es cada vez más real, pero ALLEX lleva las capacidades de interacción y versatilidad a otro nivel.
El desarrollo llega cuando robots humanoides están comenzando a realizar tareas para las que no fueron programados, lo que muestra grandes avances en inteligencia artificial aplicada que se combinan bien con las capacidades físicas de ALLEX.
WIRobotics trabaja con instituciones como MIT y Maxon para dotar al robot de capacidades aún más avanzadas. Según sus creadores, el objetivo es reducir las diferencias entre simulaciones y aplicaciones reales, facilitando el entrenamiento mediante inteligencia artificial.
Este enfoque difiere de desarrollos como el robot Ameca, que se centra más en aspectos de conciencia artificial que en aplicaciones prácticas inmediatas. ALLEX busca ser útil desde el primer momento.
El sector comercial también se suma a esta ola. Marcas como OMODA & JAECOO ya integran robots humanoides en concesionarios europeos, demostrando que las empresas están adoptando estos humanoides incluso en sectores como el automotriz.
ALLEX marca un paso importante hacia robots realmente colaborativos y seguros. Su combinación de fuerza, precisión, peso reducido y modularidad coloca a Corea del Sur en una buena posición dentro del desarrollo de robots humanoides que cambiarán cómo trabajamos y vivimos con estas máquinas. Puede que los asistentes robóticos no estén tan lejos como pensamos.