El otro gran problema de Samsung: el impacto ambiental de los Galaxy Note 7 desechados
Parece ser que a Samsung le ha surgido un nuevo problema, el de la basura electrónica. Muchos de vosotros ya sabréis de que trata, componentes o dispositivos electrónicos que ya no se encuentran en uso. Es uno de los problemas más graves e incluso países y empresas han optado por sistemas de recogida y reciclaje de este tipo de basura.
Aquí es donde entra Samsung, debido a los millones de dispositivos Galaxy Note 7 que están siendo retirados después de todos los problemas que ya conocemos, la llamada basura electrónica aumenta y por tanto los grupos ecologistas actúan de inmediato.
En concreto hablamos de la organización ecologista Greenpeace, el grupo ha iniciado una campaña de recogida de firmas en la que pretenden que Samsung retire todos los dispositivos fuera de uso de manera correcta, además de reciclar todos los componentes.
Sin embargo, Samsung actúa con una política de gestión de los residuos muy responsable desde hace años, participando incluso en sistemas de recogida selectiva y reciclaje. Pero en este caso, la página oficial de la empresa no aporta detalles sobre donde irán a parar los dispositivos que se están retirando del mercado, por tanto los grupos ecologistas no pasan por alto esta acción y quieren pedir que este problema se trate de la mejor manera.
Desde el grupo ecologista han afirmado lo siguiente: "Samsung está considerando desechar 4,3 millones de teléfonos Galaxy Note”, y “esto es el equivalente a 730.000 kilogramos de residuos en tecnología de alta gama".
Por otra parte, la organización ecologista internacional pide al líder de la tecnología que demuestre su poderío y actué transparentemente, para que los dispositivos no acaben en la basura y puedan ser reciclados para reutilizar sus materiales y/o componentes.
La compañía coreana por su parte ha anunciado que desechará todos los Galaxy Note 7 que hayan recuperado y no los reparará ni tampoco los revenderá ya que los dispositivos incluyen elementos raros como el cobalto, tungsteno, oro y por tanto podrán ser recuperados antes de tirarlos a la basura.
Samsung comentó lo siguiente en un comunicado oficial: "Somos conscientes de las preocupaciones en torno a lo sucedido con el Galaxy Note 7 y se están revisando las posibles opciones para minimizar el impacto ambiental de la retirada del dispositivo cumpliendo las regulaciones ambientales locales".
Esperemos que Samsung sea totalmente transparente y solucione este problema de la mejor manera posible, ya que parece que no nos puede afectar, pero en estos casos todos estamos en contra de la contaminación y realmente nos afecta más de lo que nos pensamos.
¿Actuará Samsung de manera correcta? ¿Guardará algunos terminales?
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