Han creado un enjambre de microrrobots futuristas que actúan como hormigas. Son una apuesta de futuro increíble
Un equipo internacional ha desarrollado microrrobots magnéticos que pueden ensamblarse en diferentes configuraciones para realizar tareas complejas con una precisión sin precedentes
Un revolucionario avance en robótica microscópica permite ahora la producción en masa de enjambres de microrrobots magnéticos que trabajan de forma coordinada. Estos diminutos robots pueden autoensamblarse en tres configuraciones diferentes para adaptarse a distintas tareas, desde escalar obstáculos hasta transportar carga, según revela un estudio publicado en la revista Device.
La innovación se basa en un proceso de moldeo por réplica in situ que permite fabricar cientos de microrrobots de 300 x 300 x 600 micrómetros, utilizando una matriz de epoxy con un 20% de micropartículas magnéticas NdFeB. El sistema alcanza una eficiencia sin precedentes en la manipulación microscópica, superando limitaciones que han frenado avances similares a los vistos en robots bio-inspirados.
La inteligencia colectiva revoluciona las capacidades de los microrrobots
El sistema funciona mediante magnetización programada de cada microrrobot. Los investigadores han logrado programar tres configuraciones magnéticas distintas (cabeza-cola, co-facial deslizada y cara a cara) que alcanzan ratios de contacto área-volumen de 3.1, 4.6 y 6.2 mm-1 respectivamente, permitiendo una coordinación precisa del enjambre.
Los enjambres demuestran capacidades extraordinarias en diversas tareas. En su configuración de alto ratio de aspecto, pueden escalar obstáculos cinco veces más altos que su longitud corporal y autolanzarse a velocidades de 1,080 longitudes corporales por segundo. Para tareas de transporte, forman estructuras tipo balsa 2D que pueden manipular objetos 1,600 veces más pesados que un solo robot.
Los campos magnéticos controlan el movimiento con una precisión similar a la observada en sistemas biológicos como las cucarachas. Los enjambres alcanzan velocidades de hasta 880 milímetros por segundo en modo orbital, demostrando una agilidad excepcional en diversos entornos, incluso bajo el agua.
La manipulación de metales resulta revolucionaria. Los microrrobots pueden modificar la forma del EGaIn, transportarlo y fusionarlo con precisión. También han demostrado capacidad para desatascar tubos obstruidos y crear conexiones eléctricas bajo demanda usando trozos conductores de indio.
Las aplicaciones médicas son muy prometedoras. Los enjambres pueden navegar por espacios reducidos, transportar cargas y realizar tareas complejas de forma autónoma. Su capacidad para trabajar tanto en medios acuosos como secos los hace especialmente versátiles para aplicaciones biomédicas.
El futuro de esta tecnología parece ilimitado. El siguiente paso será desarrollar sistemas de control aún más sofisticados que permitan operaciones totalmente autónomas en entornos complejos, especialmente en el campo de la medicina mínimamente invasiva.