La tercera empresa más valiosa del mundo lo tiene claro: la próxima revolución será la de los robots
El mundo va camino de una gigantesca hipertecnologización que siembra dudas y expectativas a partes iguales

NVIDIA, con una valoración que supera los 3 billones de dólares, ha dejado claro que su siguiente objetivo pasa por la robótica. Tras consolidarse en el ámbito de las unidades de procesamiento gráfico (GPUs) y de los aceleradores de inteligencia artificial (IA), la compañía cree que la robótica representa el próximo gran escalón de la revolución tecnológica. Y es que esos avances ya los hemos visto con robots muy avanzados físicamente o que se declaran autoconscientes aunque realmente no lo sean. El siguiente paso parece claro: la robótica lo va a conquistar todo en alianza con la IA.
Deepu Talla, vicepresidente de robótica en NVIDIA en declaraciones para el Financial Times, compara el actual momento con un punto de inflexión similar al de la irrupción de ChatGPT en el mercado. Así que nos acercamos a una nueva y creciente revolución.
Para reforzar su posición en el sector, NVIDIA quiere presentarse como la plataforma principal para la robótica, ofreciendo un ecosistema que va desde el entrenamiento de modelos de IA en sistemas DGX hasta el uso de la plataforma de simulación Omniverse y el hardware especializado Jetson. Ya han anunciado que en 2024 llegará Jetson Thor, la siguiente generación de su tecnología diseñada específicamente para aplicaciones robóticas. Con ello, NVIDIA busca abarcar todo el ciclo de desarrollo: desde la creación de modelos, pasando por la simulación, hasta la ejecución en robots reales. No es algo nuevo, los chips de NVIDIA han demostrado ser increíblemente fiables y exitosos, de hecho han tenido el chip IA más potente del mundo.
De la IA a la robótica
El auge en la capacidad de los modelos generativos de IA, unido a los progresos en la formación de robots mediante entornos simulados, parece haber sentado las bases de esta apuesta. Según Deepu Talla, la brecha entre la simulación y la realidad se reduce cada vez más, lo que permite entrenar robots de forma virtual para luego transferir esos conocimientos a entornos físicos. El objetivo es agilizar la fase de prototipado que ahora es increíblemente larga y abaratar costes, haciendo que la robótica sea más accesible para múltiples industrias e impulsándola desde la base.
NVIDIA lleva trabajando en este terreno desde 2013, cuando comenzó a desarrollar los chips Tegra, los cuales realmente estaban pensados para productos móviles, pero lentamente evolucionaron hacia los módulos Jetson y, más recientemente, hacia soluciones orientadas a vehículos autónomos y equipos industriales. De hecho, la empresa ha invertido en varias startups de robótica, como Figure AI y Apptronik, y ha colaborado con laboratorios de IA de referencia como DeepMind, que pertenece actualmente a Google.
Esta estrategia robótica también responde a un contexto en el que Nvidia se enfrenta a una creciente competencia en su sector principal, especialmente por parte de AMD, que está avanzando a pasos agigantados en materia de chips enfocados a los gráficos. Actualmente, la IA significa el 88% de los 35 mil millones de dólares en ingresos trimestrales de NVIDIA, pero la compañía no quiere limitarse a esa fuente de negocio. El mercado de la robótica, proyectado en alrededor de 165 mil millones de dólares para 2029, se presenta como el siguiente gran paso que podría fortalecer la posición de NVIDIA frente a nuevos rivales y diversificar sus líneas de producto.
Así, para Deepu Talla, la robótica se encuentra en un punto de inflexión en el que confluyen avances en hardware, algoritmos de IA y simulación. Este escenario, según la visión de NVIDIA, marca el inicio de una nueva fase para la tecnología, en la que los robots podrían integrarse de manera más natural en tareas de logística, manufactura, servicios y, por qué no, en hogares. El plan de NVIDIA es proporcionar las herramientas y plataformas necesarias para facilitar esa adopción masiva y acelerar la llegada de un futuro en el que la interacción con robots sea tan común como hoy lo es el uso de la nube o los dispositivos inteligentes.
El tiempo dirá si NVIDIA logra liderar esta revolución, pero está claro que tiene el potencial de sobra para ello. La empresa se ha configurado como un titán que hace y deshace gracias a sus potentísimos chips que han permitido obrar el salto tecnológico ante el que nos encontramos. Así, el trampolín de salto hacia la nueva revolución es bastante favorable para esta archiconocida marca.