La curiosa historia de cómo Facebook consiguió comprar WhatsApp gracias a una enfermedad
Desde que Facebook comprase WhatsApp en octubre de 2014, la plataforma de mensajería instantánea más usada en el mundo ha cambiado por completo. La compañía de Mark Zuckerberg se ha encargado de hacer que WhatsApp sea un servicio distinto al que todos conocíamos antes, a base de nuevas funcionalidades y características, además de un cambio de estructura en cuanto a la forma de obtener beneficios, retirando la modalidad de pago con la que WhatsApp contaba en sus inicios.
Pero detrás de toda esta evolución existe una curiosa historia de cómo Facebook logró adquirir WhatsApp, que recientemente ha salido a la luz gracias a un reportaje sobre Tencent realizado por Bloomberg.
El día que Facebook le robó WhatsApp a Tencent por culpa de una enfermedad
Puede que muchos de vosotros ya conozcáis la gigantesca compañía china Tencent. Para los que no hayáis oído hablar de ella --cosa bastante improbable--, probablemente sepáis de quién se trata si os digo que fue la encargada del desarrollo de WeChat, uno de los servicios de mensajería instantánea más utilizados en el continente asiático.
Sin embargo, en 2014 Tencent no parecía conformarse con lo que tenía, e intentó por todos los medios cerrar la compra de WhatsApp a inicios de ese mismo año, algo que hubiese catapultado la relevancia de la compañía en el mercado occidental, pues la plataforma de mensajería hoy perteneciente a Facebook ya contaba con una abultada cifra de usuarios.
Pero por culpa de una repentina enfermedad que afectaba a su espalda, Pony Ma, uno de los co-fundadores de Tencent, tuvo que someterse a una operación quirúrgica, viéndose forzado a retrasar su viaje a Silicon Valley para cerrar la compra de WhatsApp, cuando las dos partes del acuerdo estaban conformes, y una reunión entre ambas compañías era lo único necesario para que la empresa china se hiciera con los servicios de WhatsApp.
Entonces, Mark Zuckerberg logró adelantarse mientras el pobre Pony Ma se sometía a su operación, doblando la oferta de Tencent y ofreciendo 19.000 millones de dólares por la compra de WhatsApp. La compañía, por supuesto, aceptó semejante oferta, adquiriendo así la aplicación al completo, para continuar evolucionándola y llegar al punto en el que nos encontramos hoy. La pregunta es, ¿cómo sería hoy WhatsApp si la enfermedad no se hubiera cruzado en el camino de Tencent?
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