La mítica "pantalla azul de la muerte" de Windows está a punto de desaparecer
Microsoft elimina el icónico fondo azul de la pantalla de error más famosa de Windows y lo sustituye por un diseño completamente negro y minimalista
Después de más de tres décadas siendo el terror de cualquier usuario de Windows, la pantalla azul de la muerte está cambiando de color. Microsoft ha decidido que ya es hora de renovar por completo esta interfaz de error tan temida, y lo que viene no se parece en nada a lo que conocemos hasta ahora.
Lo más llamativo es que desaparecen el emoticono triste y el código QR que aparecían cuando tu ordenador sufría un fallo crítico. XDA Developers recoge que ahora solo verás el mensaje "Tu dispositivo ha tenido un problema y necesita reiniciarse", nada más. Y ese fondo negro que sustituye al azul de toda la vida.
Adiós a 35 años de tradición informática
La nueva pantalla sigue mostrando los códigos de error técnicos, pero ahora van en letra pequeña en la parte inferior, junto con una barra de progreso del reinicio. Microsoft dice que así es menos intimidante, aunque hay usuarios que comentan que el negro resulta más inquietante que el azul de siempre.
Por ahora solo los usuarios de Windows Insider están viendo esto en sus equipos, y curiosamente les aparece en verde mientras duren las pruebas. Microsoft tiene pensado llevarlo a todos los usuarios de Windows 11 en las próximas semanas, y van a mantener el nuevo diseño aunque al final decidan volver al azul.
Es el primer cambio importante que ve la pantalla azul desde que Windows 8 le añadió esa carita triste en 2012. Esta pantalla lleva décadas siendo parte del folclore informático, apareciendo en memes y siendo motivo de más de un quebradero de cabeza.
No todo el mundo está contento con el cambio. Mientras que algunos aplauden que sea más sencilla, otros echan de menos ese código QR que permitía buscar rápidamente una solución al problema. Además, varios expertos han señalado que la nueva pantalla se parece demasiado a las de actualización de Windows, lo que puede confundir a los usuarios.
El momento del cambio no es casualidad. En julio del año pasado vivimos el caos de CrowdStrike, que hizo que ordenadores de medio mundo se quedaran en pantalla azul, afectando a bancos, aerolíneas y empresas de todo tipo. Microsoft tuvo que desarrollar una herramienta especial para solucionar el problema.
Microsoft va en línea con el diseño más limpio que busca con Windows 11, aunque la pantalla sigue siendo lo que era: un aviso de que algo ha fallado gravemente. La compañía asegura que toda la información técnica sigue disponible, solo que presentada de una forma menos alarmante para el usuario.