¿Ya no se puede innovar en un smartphone?
Aún resacosos de la llegada de LineageOS oficial cada día vamos sabiendo nuevas novedades en el mundo del desarrollo en Android. Hace nada nos hacíamos eco del resurgir de uno de los móviles más emblemáticos en este mundillo; LineageOS llegaba al OnePlus One.
Y mirando la lista de los dispositivos, nos topamos con una lista reducida. Pero sobre todo, con un nombre bastante desconocido para muchos. El Nextbit Robin también posee soporte de LineageOS --y de los primeros-- y me quedé sorprendido, pues sigo muy al día el mercado móvil y no reconocí este teléfono. Hasta que investigué.
A muchos les parece feísimo, y me podréis llamar lo que queráis, pero mi enamoramiento por este diseño fue tal, que me planteé este móvil como alternativa directa al OnePlus 3T que pensaba comprarme, siendo infinitamente peor que el segundo. Basado en la nube, con especificaciones decentes... Y algo pensé para mí. Sí, el móvil puede gustar a algunos, u otros pueden odiarlo, pero es un diseño que no deja a nadie indiferente, y nunca visto. Por lo que... ¿Qué ha pasado en el mundo de los smartphones? ¿Ya no se puede innovar?
La innovación, terreno peligroso
Si nos fijamos en algunos topes de gama, podemos ver clara la diferencia. Los primeros diseños de OnePlus, en sus primeros smartphones como el OnePlus X, cuyo análisis hicimos fueron atrevidos, bonitos, rompedores. Con el reciente OnePlus 3 y su pequeña renovación, el OnePlus 3T, posiblemente el mejor móvil del mercado todo cambió. Ese diseño metalizado es más típico, y aunque ha tenido mejor aceptación, su diseño es casi igual al 90% de móviles chinos y demás que corren por el ecosistema de Android. ¿Qué ha pasado?
Es curioso, porque a la par que el diseño estándar parece entrar más fácilmente, diseños de otras marcas mucho más atrevidos, como los Galaxy Edge o rompedores como la bestia parda que es el Xiaomi Mi MIX también arrasan, convirtiéndose en estándares en estas lindes. ¿Dónde está la línea de la innovación y la aceptación? Recordemos el fiasco que se llevó el tan odiado LG G5 y su modularidad que han conseguido que su sucesor se bajara del carro. O lo que ha encantado el Honor 8, y su brutal diseño en cristal.
Quizás te interese: Por qué la decisión de Samsung de sacar el Galaxy Note 8 es una gran noticia
Miedo ante lo predecible
Si bien es cierto que el diseño de los smartphones actuales es infinitamente superior a las generaciones pasadas sorprendiéndonos con más calidad y más nivel, el mercado está pecando de conformismo al repetir o copiar diseños ajenos. Olvidándonos un segundo del mercado chino, la brecha de lo que enamora y lo que es seguro cada vez es más grande, condenándonos a ver una amalgama de smartphones tan repetidos y tan variados que no sepamos cuál elegir, o que el que nosotros queremos se descomercialice debido a su poca aceptación, como el OnePlus X.
No es algo que me quite el sueño, pero tengo un miedo real a que en el futuro, el estándar de diseño sea tan típico que lo innovador esté condenado a morir. Fijémonos en el Nextbit Robin... apenas nadie conoce ese teléfono y muchos son los que aman el concepto de la nube. Aunque adoro el OnePlus 3T, su diseño me parece algo más típico, y a mí, me ha producido el miedo de ver como una marca que se moría por innovar ha acabado subiéndose al carro de lo seguro.
Si algún responsable de alguna marca me está leyendo, debo decir lo siguiente. Arriesgar es ganar y sin copiar diseños innovadores tipo Galaxy S7 Edge, si las marcas encuentran su seña de identidad, a la gente le gustará, y crearán un precedente en el mundo de los smartphones.
Innovación, no mueras.
¿Qué opinas sobre el Nextbit Robin?
Para estar siempre al día con lo último en tecnología, suscríbete a nuestro canal oficial y verificado de Andro4all en WhatsApp.