Nothing ear (1) Black Edition, análisis: transparencias y calidad de sonido como grandes apuestas

Todas las miradas apuntan a Nothing desde su nacimiento. La compañía fundada en 2020 por Carl Pei, uno de los creadores de OnePlus, genera grandes expectativas con cada anuncio que realiza. De momento, solo ha lanzado un producto al mercado, sus auriculares inalámbricos ear (1), pero 2022 promete ser un año de grandes sorpresas por parte de este nuevo integrante en el mercado.

Mientras esperamos el lanzamiento de su primer smartphone el próximo año, Nothing quiere cerrar 2021 con una nueva versión de sus auriculares inalámbricos. Su nombre es Nothing ear (1) Black Edition y, como su propio nombre indica, el cambio más relevante es que son de color negro. Estos auriculares mantienen el diseño transparente que tanto nos gustó de la primera edición, además de ser más respetuosos con el medio ambiente en materia de emisiones de carbono.

En Andro4all hemos tenido la oportunidad de probar los Nothing ear (1) Black Edition durante unas semanas, tiempo suficiente para descubrir si realmente su diseño es tan bonito como parece o si su batería llega a las 34 horas prometidas. Además, estos auriculares inalámbricos también destacan por su cancelación de ruido y las promesas de una buena calidad de sonido. Todos estos aspectos los hemos analizado, y estamos aquí para contarte cómo ha sido nuestra experiencia. ¡Vamos allá!

• Nothing ear (1) Black Edition, opinión y puntuación
• Precio de los Nothing ear (1) Black Edition y dónde comprarlos
• Ficha técnica de los Nothing ear (1) Black Edition
• ¿Dónde se sitúan los Nothing ear (1) Black Edition?
• Diseño
• Sonido y cancelación de ruido
• Autonomía y carga
• Experiencia de uso: software, controles táctiles y conectividad

Nothing ear (1) Black Edition, opinión y puntuación

Precio de los Nothing ear (1) Black Edition y dónde comprarlos

Los Nothing ear (1) Black Edition salen al mercado con un precio de 99 euros, igual que la edición de color blanco. Puedes comprar esta nueva versión de los auriculares inalámbricos con más hype en la tienda oficial de Nothing, así como en Amazon a partir del 13 de diciembre.

Además, la compañía ha anunciado recientemente su asociación con otros dos comercios muy populares: El Corte Inglés y Fnac, por lo que los Nothing ear (1) Black Edition también estarán disponibles en ellos.

Ficha técnica de los Nothing ear (1) Black Edition

¿Dónde se sitúan los Nothing ear (1) Black Edition?

Los Nothing ear (1) Black Edition salen al mercado por 99 euros // Imagen: Beatriz Alcántara Gil

Los Nothing ear (1) Black Edition se sitúan en la misma posición que los Nothing ear (1) de color blanco, pues ambos tienen las mismas características. Exceptuando el color y los niveles de emisión de carbono, los auriculares inalámbricos de Nothing son iguales. Cabe destacar que la compañía asegura haber vendido ya más de 220.000 unidades del modelo en blanco, por lo que parece querer seguir sumando éxitos ofreciendo más posibilidades de elección al público.

Dentro del mercado general, los Nothing ear (1) Black Edition son unos auriculares inalámbricos de gama media que se enfrentan a una dura competencia. Aunque son más caros, por cuestiones de características los podríamos situar al mismo nivel que los Samsung Galaxy Buds 2, los Huawei FreeBuds Pro o los Jabra Elite 75t. En algunas cuestiones los Nothing ear (1) son superiores, como el diseño innovador o la autonomía de hasta 34 horas.

Por otro lado, los auriculares de Nothing llegan también para competir con los AirPods de segunda generación, situándose como una buena alternativa barata a los populares auriculares de Apple.

Diseño

El diseño es el gran atractivo de los Nothing ear (1) Black Edition. Aunque quizás no son tan llamativos como los de la versión anterior en blanco, al apostar por una estética “total black” logran un toque elegante y sofisticado que también es de apreciar.

Además, aunque sean negros, mantienen esa parte transparente en las patillas que tanto nos gusta. Es posible ver el interior de estos auriculares inalámbricos, ver cómo los componentes se agrupan en su interior para ofrecer una buena experiencia de uso. Los auriculares se completan con un acabado mate que les sienta realmente bien y unas puntas de silicona.

Es necesario que le prestes atención a las puntas, pues son claves a la hora de lograr una buena sujeción y una mejor cancelación del ruido exterior. Por ello, al usar los Nothing ear (1) por primera vez, debes probar los tres tamaños diferentes de almohadillas que vienen junto a los auriculares para elegir el más adecuado para tus oídos.

Así es uno de los auriculares Nothing ear (1) Black Edition de cerca // Imagen: Beatriz Alcántara Gil

En su parte externa hay dos elementos de gran utilidad: los controles táctiles y un círculo de color que te indica a qué lado va cada auricular. En primer lugar el control táctil se sitúa en la parte superior de la patilla, y te ofrece posibilidades de las que hablaremos en el correspondiente apartado.

Por otro lado está el círculo de color del que hablamos, que también se encuentra en la parte superior de la patilla. En vez de añadir la típica R o L presente en la mayoría de auriculares, Nothing ha optado por poner un círculo rojo en el auricular derecho y uno blanco en el izquierdo, manteniendo así la importancia de estos dos colores en el diseño.

Son unos auriculares cómodos y ligeros, con un peso que baja de los 5 gramos

Los ear (1) Black Edition son unos auriculares inalámbricos muy cómodos. En primer lugar, esto se debe a su ligereza, pues tienen un peso de tan solo 4,7 gramos por cada auricular. Además, en este punto a favor también juegan un importante papel las puntas de silicona, que nos permiten utilizarlos durante horas sin apenas notar que los llevamos puestos. Estas almohadillas son las que logran también que se sujeten con buena fijación a la oreja.

Los auriculares de la firma de reciente creación están fabricados en plástico, pero en ningún momento dan sensación de mala calidad de construcción, todo lo contrario. Además, debes saber que tienen resistencia IPX4 al agua y al sudor, por lo que puedes utilizarlos para hacer deporte.

La belleza en el diseño está presente también en el estuche de carga, que mantiene la apuesta por las transparencias. Podemos ver los auriculares cuando están guardados dentro, pero no la construcción completa de este estuche construido también en plástico. La verdad es que no se adhieren mucho las huellas y la suciedad, pero sí sufre por los arañazos. En nuestro caso, ya contamos más de uno y de dos con apenas dos semanas de prueba.

Estamos ante una caja cuadrada que cabe perfectamente en el bolsillo. Podemos transportarlo cómodamente, no solo por su tamaño, sino por su peso de 57,4 gramos. Este estuche monta un imán en uno de sus extremos para lograr un cierre seguro. Eso sí, a la hora de abrirlo necesitarás las dos manos. Para que sea más cómodo, puedes colocar un dedo en la concavidad de la tapa.

Estuche de carga cerrado de los Nothing ear (1) Black Edition // Imagen: Beatriz Alcántara Gil

Más allá de esto, el estuche de carga cuenta en su lateral derecho con un puerto de carga USB-C y un botón para emparejarlos con otros dispositivos Bluetooth. Además, en la parte interior cuenta con una pequeña luz LED que nos informa sobre el estado de los auriculares: cargándose, en modo emparejamiento o ya conectados.

En ese sentido, debo comentar que hubiese sido buena idea añadir una pequeña luz LED a los auriculares que se mantuviese en rojo mientras estos se cargan. Así, cuando esta se apagase, el usuario sabría que la carga ya ha finalizado y que puede volver a utilizar los auriculares. Es un detalle sin mucha importancia, pero hubiese ayudado.

Más allá de esto, el estuche de carga tiene dos huecos en su interior, uno para cada auricular. Se sujetan a través de imanes, que también sirven para la carga. Eso sí, debo mencionar que me ha costado unos intentos entender cómo se colocan los auriculares dentro del estuche.

Las dos versiones de los Nothing ear (1) comparten características técnicas // Imagen: Beatriz Alcántara Gil

En general, los Nothing ear (1) Black Edition son unos auriculares inalámbricos con un diseño muy cuidado desde que la primera caja en la que vienen guardados. No se puede negar que este color en negro les da un aspecto muy elegante, manteniendo la innovación de la transparencia. Además, son cómodos, un detalle que siempre es importante.

No podemos olvidarnos de su neutralidad en materia de emisiones de carbono, una de sus grandes diferencias con la anterior edición de color blanco. Esta Black Edition es más respetuosa con el medio ambiente, y eso siempre es algo positivo.

Sonido y cancelación de ruido

Al analizar unos auriculares inalámbricos no podemos olvidar que la calidad de sonido es el aspecto que más importa, pues queremos escuchar la música, las series o cualquier contenido de la mejor forma posible. Con respecto a estos Nothing ear (1), podemos concluir que la calidad de sonido es tan buena como podríamos esperar.

Los auriculares inalámbricos de Nothing montan unos controladores dinámicos de 11,6 milímetros y una espaciosa cámara de aire para lograr que el audio se escuche con muy buena calidad. Además, el sonido ha sido afinado por los audiófilos de Teenage Engineering, según explican desde la propia compañía londinense.

La calidad de sonido es uno de los puntos fuertes de estos auriculares inalámbricos

En general, los Nothing ear (1) ofrecen una buena calidad de sonido para su precio, con agudos claros y graves muy potentes. Durante estas semanas de pruebas, los hemos utilizado con temas de diferentes géneros, y podemos concretar que estos auriculares se lucen especialmente con canciones en las que los graves son predominantes. En general, el sonido no es impresionante, pero cumple con buena nota.

Otra cosa muy diferente es la cancelación de ruido, que ha resultado ser decepcionante. En mi caso, utilizo mayoritariamente los auriculares para trabajar, no solo para escuchar música, sino también para aislarme del ruido que me rodea -vivo al lado de tres obras diferentes en estos momentos, mal asunto-. Por ello, confiaba en estos Nothing ear (1) para minimizar ese ruido y concentrarme mejor en mi tarea.

Sin embargo, la cancelación de ruido de estos auriculares resulta insuficiente, pues se siguen escuchando en parte los sonidos exteriores. Da igual que recurramos a la app para activar el modo extremo de la ANC, esta seguirá siendo tan solo discreta. Esto se lo podemos achacar también al diseño de los auriculares, que al no tapar toda la concha de la oreja, no cancelan de forma pasiva el ruido tanto como pudiéramos desear.

Quizás la cancelación de ruido de estos Nothing ear (1) me ha resultado decepcionante porque vengo de probar los Creative Outlier Air V3, unos auriculares inalámbricos más baratos cuya ANC me sorprendió para bien.

Además, también debo mencionar que la experiencia es exactamente igual en los Nothing ear (1) de color negro que en los de color blanco. Viendo que este punto débil ya estaba presente, el fabricante podría haber aprovechado el lanzamiento de la nueva versión para mejorar este aspecto.

El diseño de los ear (1) de Nothing influye en la cancelación de ruido // Imagen: Beatriz Alcántara

Al usar estos auriculares también podemos aprovechar el modo transparencia, una función dirigida a escuchar los sonidos exteriores con más potencia sin tener que extraerlos de nuestros oídos. En definitiva, un amplificador. El modo transparencia de los Nothing ear (1) ofrece una experiencia simplemente correcta, potenciando las voces del exterior para que escuches mejor a la persona con la que estás hablando, pero tampoco lo hace de una forma sorprendente.

Por último, nuestros protagonistas equipan tres micrófonos de alta definición para que puedas comunicarte por teléfono, grabar audios o vídeos mientras los utilizas y que siempre se te escuche bien. Además, utiliza la tecnología Clear Voice y algoritmos avanzados para que el viento no sea un problema. Según nuestra experiencia, los micrófonos tienen un buen comportamiento, permitiendo una perfecta comunicación entre los interlocutores.

Autonomía y carga

Nothing no ha hecho públicos los datos sobre las características de la batería de estos ear (1), ni de los auriculares ni del estuche de carga. Sin embargo, aunque no sabemos la capacidad completa, sí podemos hablar de su autonomía utilizando como referencia nuestra experiencia.

Durante estas semanas, hemos podido disfrutar de una autonomía que ronda las 5 horas de reproducción continua con la cancelación de ruido activada. En general, hemos podido utilizarlos los auriculares durante una mañana completa antes de tener que guardarlos en el estuche para cargarlos.

Como siempre, la autonomía puede crecer hasta las 6-7 horas si se prescinde de la cancelación de ruido, aunque esto depende de la decisión personal de cada usuario. Cuando llega la hora de pasar por el estuche de carga, este puede proporcionar unas cuatro o cinco cargas adicionales.

Puerto USB en el estuche de carga de los Nothing ear (1) // Imagen: Beatriz Alcántara Gil

La compañía promete unas 25 horas de autonomía con el estuche y utilizando la cancelación de ruido, aunque, según nuestra experiencia, la duración real es algo menos. Además, el con la ANC desactivada, la autonomía completa utilizando el estuche de carga puede llegar a las 34 horas.

Un punto a favor de estos auriculares inalámbricos es que cuentan con carga rápida, por lo que basta una carga de unos 10-15 minutos para ganar unas horas de autonomía. Además de por cable USB-C, también se pueden cargar de forma inalámbrica.

Experiencia de uso: software, controles táctiles y conectividad

Ya lo hemos comentado en el apartado del diseño, los controles táctiles de estos Nothing ear (1) Black Edition se encuentran en la parte superior de la patilla, manteniendo la misma posición que tenían en los de color blanco. La zona táctil no es muy grande, pero suficiente para que reconozca con buena precisión nuestros toques cuando queremos mandarle alguna acción.

En general, los controles táctiles de los auriculares funcionan muy bien, permitiendo pasar rápidamente de canción, parar la reproducción o activar la cancelación de ruido sin sacar el teléfono del bolsillo. Eso sí, aunque no está relacionado directamente con los controles, debemos mencionar que hubiésemos agradecido que una voz explicase qué modo has activado en cada momento.

Los controles táctiles de estos auriculares inalámbricos tienen un buen funcionamiento // Imagen: Beatriz Alcántara Gil

Los Nothing ear (1) solo informan del paso entre el modo de cancelación de ruido, el modo transparencia y la desactivación completa de modos a través de una notificación sonora, por lo que es posible que en algunos momentos no sepas qué modo está habilitado hasta que no entras en la app. Tampoco hay un asistente de voz que confirme que los auriculares se han conectado a otro dispositivo o que informe sobre el nivel de batería restante.

Hablando de la app, en la desarrollada por Nothing para gestionar el uso de sus ear (1) encontramos las funciones básicas para ello. La aplicación se llama como los auriculares y se puede descargar de forma gratuita para Android e iOS. Aquellos con un móvil con el sistema operativo de Google disfrutarán de emparejamiento rápido. Basta con abrir el estuche de carga para que el teléfono los detecte y te invite a conectarlos.

Google Play Store | ear (1)

Una vez conectados, llega el momento de abrir la app para descubrir qué tiene que ofrecernos. En primer lugar, vemos una imagen de los auriculares con el estado de la batería de cada uno de sus componentes. Para encontrar el resto de funciones, tenemos que toquetear un poco, pero la verdad es que la sencillez es la principal característica de la aplicación, para bien o para mal.

Dentro del apartado "Hear" encontramos las funciones para personalizar el sonido. Podemos activar la cancelación de ruido y elegir entre el modo ligero y el máximo, y también habilitar el modo transparencia para escuchar mejor a los que tenemos alrededor.

Además, tenemos acceso al ecualizador, donde podemos elegir entre un sonido equilibrado, más agudo, con más potencia en los graves o que le otorgue más importancia a las voces. No podemos pasar por alto que es un ecualizador muy básico para unos auriculares de este precio, que no nos permite personalizar a nuestro gusto el sonido.

Otro apartado de suma importancia es "Touch", que nos permite configurar los controles táctiles. Por ejemplo, puedes elegir que un triple toque en el auricular izquierdo signifique volver a la siguiente canción.

Dentro de la app ear (1) puedes pinchar también en el botón de tres puntos de la esquina superior derecha para acceder a más funciones. Una que nos ha llamado la atención es "Find my earbud", que sirve para hacer sonar los auriculares cuando los has perdido, así puedes localizarlos rápidamente. También puedes elegir activar el modo de baja latencia y actualizar el firmware de los auriculares para recibir las últimas novedades.

Por último, con la aplicación también puedes activar la detección in-ear, es decir, activar el funcionamiento de los sensores de proximidad para que la música se detenga automáticamente cuando te los quitas. Después, cuando vuelves a colocártelos, la música vuelve a reproducirse por donde la habías dejado.

Poco más puedes hacer con la aplicación de Nothing para sus ear (1). Si has prestado atención, te habrás dado cuenta de que las funciones que hemos mencionado están en inglés. Este es uno de sus principales inconvenientes, así como el hecho de que no nos ofrezca un ecualizador a la altura.

Fuera de la app, cabe mencionar también que los ear (1) no tienen asistentes personales, ni Google Assistant ni Alexa ni Siri. Estos sí están presentes en auriculares más baratos, como los Outlier Air V3 de Creative que hemos mentado anteriormente, así que era de esperar que estos de Nothing también contasen con ellos.

En cuanto a la conectividad, los Nothing ear (1) Black Edition cuenta con Bluetooth 5.2 para conectarse de forma inalámbrica a otros dispositivos. Durante estas semanas de prueba no hemos tenido problema alguno en este sentido, disfrutando de una conexión estable que no se dañaba ni aunque nos separásemos unos metros del dispositivo que enviaba el audio.

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