¿Será el Qualcomm Snapdragon 805 tan innovador como muchos esperamos?
Si nos basamos en los planes que presentó a principios de año el fabricante de procesadores Qualcomm, deberíamos esperar la aparición de los primeros dispositivos con el nuevo Qualcomm Snapdragon 805 para estos meses de verano. Fueron muchos los rumores que lo situaban antes de hora en algunos de los buques insignia de las principales compañías, como podrían ser el HTC One (M8) o el Samsung Galaxy S5, pero finalmente el calendario se ha cumplido y no ha sido hasta ahora que ha empezado a asomar la cabeza.
Después de muchos meses de espera, algunos periodistas tecnológicos han podido acceder a unos terminales de desarrollo equipados con los nuevos procesadores, pudiendo realizar algunas pruebas de rendimiento para poder ver sus resultados reales. En este caso, los datos que os podemos facilitar provienen de las pruebas que realizo Anand Lal Shimpi para AnandTech.
Pero para empezar, qué mejor que hacer un repaso de las novedades con el vídeo de presentación que Qualcomm realizó para el procesador:
A modo de resumen y sin entrar en tecnicismos, nos encontramos que este SoC cuenta con un procesador de 4 núcleos Krait 450 con una velocidad que alcanzará los 2,65 GHz y una GPU Adreno que se actualizaría a la versión 420. Es precisamente en la gráfica en el aspecto en el que más han trabajado en Qualcomm, obteniendo un incremento en el rendimiento de aproximadamente un 40%, a la vez que se ha reducido su consumo un 20%. A estas mejoras, tendríamos que añadirle también su compatibilidad con OpenGL ES 3.1, OpenCL 1.2 y Direct3D 11.2.
Si comparamos los resultados que obtenemos en el procesador únicamente, veremos que la mejora es más bien mínima. Comparado con los actuales Qualcomm Snapdragon 801 a 2,5 GHz, el rendimiento mejora tan solo un 6%, un incremento que podríamos incluso perder según la optimización y arquitectura que tenga el terminal que lo use. Dejando de lado al iPad Air, cuyo resultado parece de otra generación distinta, vemos que la generación actual de terminales de gama alta no se sitúa demasiado lejos de los resultados obtenidos con la tableta de desarrollo de Qualcomm, por lo que demostraría lo dicho más arriba.
Como ya avanzaba anteriormente, es en el apartado gráfico en el que vamos a notar más cambios gracias a la GPU Adreno 420, la cual se convertirá en la primera de la serie 4XX. Los resultados obtenidos por AnandTech muestran que respecto a la actual Adreno 330 la mejora se sitúa entre un 20 y un 50% y situándose a la cabeza en la tabla sin que ningún rival pueda acercarse (a diferencia de la anterior prueba). Lo que sí que no se ha podido comprobar es si realmente se nota la mejora en el consumo, puesto que el dispositivo de prueba estaba conectado a la corriente, por lo que queda esta duda por resolver.
Así pues, a la espera que los futuros Qualcomm Snapdragon 808 y 810 lleguen a escena, cosa que se espera para principios del año que viene, la versión 805 del SoC se convertirá en un paso intermedio en el que su principal atractivo serán las importantes mejoras en el apartado gráfico. Poniendo sus cartas sobre la mesa, el rival más duro proviene de Nvidia, con su Tegra K1 (del que ya pudimos ver una comparativa con el Qualcomm Snapdragon 801), otro SoC de altas prestaciones y que ya podemos encontrar en algunos modelos en el mercado.
Como ya he comentado en anteriores artículos, hasta ahora el campo de los procesadores ha podido crecer de forma muy rápida ya que se partía de muy abajo comparado con las tecnologías que podemos encontrar en ordenadores o dispositivos parecidos. Está claro que la comparativa entre unos y otros no es muy real debido a las diferentes arquitecturas usadas, pero en cualquier caso, había mucho margen para mejorar. Por el contrario, ahora llega estamos en un período de dos años en el que se plantean nuevos objetivos y en los que los cambios no son tan acusados entre una generación y otra.
Respecto al Qualcomm Snapdragon 805, es complicado imaginar que podremos verlo en el LG G3, el buque insignia que se presentará más pronto, pero no sería descabellado esperar verlo en las versiones "revisadas" del HTC One (M8) y del Samsung Galaxy S5. Dichas versiones, que se rumorea que añadirían la partícula "Prime" al final de su nombre en ambos casos, mejorarían en algunos aspectos a la generación actual y no sería de extrañar que fueran presentadas hacia finales de verano o incluso dentro del marco del IFA de Berlín. De todas formas, esto no son más que suposiciones, por lo que tendremos que esperar un poco para ver qué es lo que realmente nos deparan las grandes y pequeñas marcas.
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