Ni cápsulas ni complicaciones: esta máquina prepara espresso y espuma como en la cafetería
Su molinillo cerámico tiene 15 ajustes para que consigas el tamaño de molienda que estás buscando
Hay cafés que simplemente te despiertan, yo otros que marcan la manera de empezar el día. Los primeros son un mero trámite, un líquido caliente que pasa por la taza y por ti sin dejar huella. Los segundos son un momento. Empiezan con un inconfundible aroma que ya aspiras antes del primer sorbo, siguen con esa crema dorada que brilla en la luz de la cocina y terminan con un sabor que te acompaña incluso tiempo después de haberlos acabado.
Por las mañanas, la diferencia se nota más que nunca. Porque un buen café no solo despeja, también marca el inicio del día, el ritmo, y te recuerda que es posible empezar bien el día antes de contestar el primer correo o acudir a la primera reunión. Por eso creo que necesitas una máquina como la Philips Barista Brew para cambiar tu rutina y hacerlo de la mejor forma posible.
Este modelo, que según la propia web de Philips tiene un precio oficial de 679,99 euros, ahora está disponible por 375 euros en Amazon, en una de esas ofertas que no podemos dejar pasar. Se trata de ahorrarnos 305 euros en una cafetera que te acompañará durante muchos años y que cambiará por completo la manera que tienes de entender y de disfrutar del café en casa. Y, especialmente si eres cliente Amazon Prime, disfrutarás de envío y devolución gratis en tiempo récord, para que la puedas estrenar mañana mismo.
Philips Barista Brew: una experiencia de barista sin salir de casa
Frente a modelos como la Philips Serie 3300 que apuestan por los colores negros, la sobriedad y el minimalismo, me gusta que esta Barista Brew tenga un estilo más de bar, un diseño más profesional pero igualmente versátil, para que lo puedas colocar en cualquier cocina. Es una cafetera robusta pero sin necesidad de ser gigantesca, mide unos 33,4 cm de ancho, y sus botones frontales junto a su dial lateral harán que sea muy fácil de utilizar. Todo está hecho de acero inoxidable, alineado con esa estética barista que ya convence a nivel visual.
Es una muy buena cafetera, mejor que las automáticas que requieren más mantenimiento. Perfecta si buscas un buen café siempre
Como es habitual en este tipo de cafeteras, esta Philips cuenta con un molinillo integrado. Utiliza muelas cerámicas y ofrece 15 ajustes diferentes para que puedas seleccionar con precisión el tamaño del grano que estás buscando, ya que es algo que afectará directamente a la intensidad del café que prepares. A través del manómetro frontal podrás ver cómo va la extracción, siendo partícipe del proceso desde el primer momento.
Si eres de los míos y te cuesta tomar el café si no tiene algo de leche, te gustará saber que esta Philips Barista Brew incorpora un brazo de vapor resistente, largo y un mango de silicona que es frío al tacto. Será el que te permita texturizar la leche y conseguir una microespuma digna de bar. No se trata de calentar leche y añadirla al café sino de fusionarlo con detalle para que esa capa sea perfecta a la hora de preparar cualquier variedad con leche, desde cortados hasta capuchinos. Incluso viene con una jarra de 450 ml que tiene un indicar de temperatura incorporado para que añadas la leche en el punto exacto.
Si nunca has tenido una cafetera de este estilo y temes que te pueda abrumar un poco al principio, no te preocupes, esta Philips será muy fácil de utilizar. No hay menús escondidos ni pantallas saturadas de opciones. La Barista Brew concentra todo lo importante en un panel limpio y lógico. A la izquiera está el panel de encendido, justo después tres iconos que te permitirán decidir entre un espresso simple, una doble para esas mañanas que necesitan un refuerzo o un americano si quieres alargar el café. En el centro está el manómetro circular, que te mostrará el nivel de presión en tiempo real. Y, a la derecha, el botón para activar el agua caliente o vapor y la lanza que creará esa espuma suave de la que hablábamos. Todo está colocado para que tu mano se mueva sin pensar y sin tener que dedicar tiempo a releer manuales de instrucciones.
Esta Philips no es una cafetera para ocultar en un rincón. Parece que invite a tocarla, a innovar con ella ajustando el molido, ensayando con la presión y disfrutando del proceso, desde el principio hasta el final. Lo que te devolverá siempre es un café bien hecho, con presencia y sin complicaciones, y con ese sabor cafetero que hasta ahora solo podías disfrutar en las cafeterías. Y lo hace con más de 300 euros de descuento, una cifra que tardamos poco en pronunciar pero bastante en ahorrar.
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