Análisis realme 14 5G: el teléfono de entrada perfecto para gamers

He tenido la oportunidad de probar prácticamente todos los realme que han ido saliendo en el último año, desde su tope de gama, el GT7 Pro, que es un auténtico flagship killer hasta su gama media, que es realmente interesante con el realme 14 Pro. La verdad es que con el paso de los años se han ido configurando como una de mis marcas favoritas dentro del mercado que busca ofrecer la calidad y el precio más ajustados.

Ahora es turno de hablar del realme 14 5G, un dispositivo mucho más ajustado en su precio y que busca llegar a un público que no quiere hacer una inversión tan grande en su teléfono pero siempre con las mejores calidades.

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Dicho esto, vamos a ver qué es lo que nos tiene que ofrecer el terminal a nivel general.

• Especificaciones técnicas del Realme 14 5G
• Diseño: agresividad contenida que funciona
• Pantalla: AMOLED que deslumbra pese a los marcos
• Rendimiento: Snapdragon que cumple
• Experiencia de uso: realme UI con luces y sombras
• Batería: la gran estrella del conjunto
• Cámaras: menos es más
• Conclusión: un teléfono gaming honesto y con las cosas claras

Especificaciones técnicas del Realme 14 5G

Diseño: agresividad contenida que funciona

Estéticamente, el realme 14 5G es realmente interesante

El diseño del realme 14 5G cumple de sobra con lo que cabe esperar de este teléfono más enfocado al gaming, y debo reconocer que la propuesta estética me ha convencido desde el primer momento. Tiene unas líneas agresivas que inmediatamente comunican su propósito, unos colores que enganchan y ese toquecito "agresivo" que tan bien luce en estas situaciones donde el gaming es protagonista. Y eso que en Andro4all hemos analizado el de color negro, existen versiones en blanco con un estilo todavía más agresivo.

Lo que más me ha llamado la atención es que no es muy pesado, algo que se agradece enormemente durante las sesiones de juego prolongadas, y además teniendo la batería gigantesca que tiene. El diseño plano, con las esquinas ligeramente redondeadas, ofrece un equilibrio bastante notorio. Eso sí, está claro que aunque no es un dispositivo premium, cumple bastante bien con lo que se espera de él en este segmento de precio.

El puerto de carga del realme 15 5G

La distribución de elementos del teléfono está bien pensada: en la parte inferior encontramos los altavoces, la rendija para insertar la tarjeta SIM y el puerto de carga, mientras que en el lateral derecho están el resto de botones. Esta configuración resulta ergonómica y funcional durante el uso diario. Tanto si lo estamos utilizando en posición vertical para nuestro día a día como en horizontal para gaming, este es nuestro teléfono.

Pantalla: AMOLED que deslumbra pese a los marcos

Siendo sinceros, hay algo del diseño que me ha chirriado un poco, y es que la pantalla no ocupa todo el chasis, dejando unos marcos negros que estéticamente no son lo mejor que hay en el mercado actual. Sin embargo, una vez que enciendes la pantalla, estas cuestiones pasan a un segundo plano porque la calidad visual es realmente impresionante para el rango económico en el que nos estamos moviendo con este temrinal.

Pese a esos marcos, la pantalla es excelente, con un panel de tipo AMOLED con 6,67 pulgadas y refresco de 120 Hz, lo que está muy bien para su rango de precios. Esta combinación de tecnología AMOLED con alta tasa de refresco marca una diferencia notable en la experiencia de uso diario y, sobre todo, cuando vamos a quemar algún juego como Call of Duty o cualquiera de Mi-HoYo.

La pantalla del realme 14 5G es realmente funcional e interesante, sobre todo para jugar en interiores

A mí los colores que elige Realme me gustan especialmente, ya que normalmente opta por una saturación correcta, unos tonos cálidos y unos colores oscuros con mucho contraste. En general, una excelente pantalla que cumple las expectativas de manera sobresaliente. Los negros profundos típicos del AMOLED se combinan perfectamente con esa calibración de colores característica de la marca.

Cuando jugamos, nos encontramos con que esto se traslada al ocio interactivo, permitiéndonos momentos muy interesantes, vibrantes y con una gran fluidez que hace que los juegos se vean espectaculares. La alta tasa de refresco se nota especialmente en títulos competitivos donde cada frame cuenta.

El sonido, por otro lado, cojea algo más, suena un poco a lata, aunque es de agradecer que tenga dos altavoces. Esta es quizás una de las pocas pegas que le pongo al apartado multimedia, ya que el audio no está a la altura de la calidad visual que ofrece la pantalla.

Rendimiento: Snapdragon que cumple

El rendimiento está bien dentro de su gama gracias al Snapdragon 6 Gen 4, y debo destacar especialmente su procesador gráfico Adreno 810 que permite jugar a lo que queramos sin mayores complicaciones. Esta combinación de procesador y GPU se muestra solvente en la mayoría de escenarios de uso. Pero, desafortunadamente, a la hora de dar el 'do' de pecho en el día a día, sí que se queda un poquito flojo (aunque sigue cumpliendo).

En el día a día tiene fluidez de sobra, funciona muy bien y en general no da muchos problemas, pero es cierto que a veces podría exigírsele algo más de fluidez en el día a día. No es que sea lento, pero ocasionalmente se nota que no estamos ante un procesador de gama alta, especialmente en multitarea intensiva.

El realme 14 5G tiene una estética que podría aparentar incluso ser premium

Como todo lo que hace realme, el producto tiene toneladas de memoria RAM, en este caso, 8 GB, más que suficiente para el día a día. Esta cantidad de RAM asegura que las aplicaciones se mantengan activas en segundo plano y que el cambio entre ellas sea fluido, algo especialmente importante para usuarios que alternan entre gaming y otras tareas. En este sentido, como es de esperar, no se ven problemas de rendimiento dentro de los terminales de realme.

Además, trae varios accesorios muy interesantes, como una batería externa o un refrigerador, todo tematizado al estilo Free Fire, el mítico juego battle royale que tanto arrasa en móviles y con el que realme ya ha tenido alguna que otra colaboración. Estos complementos demuestran el enfoque gaming del dispositivo y añaden ese toque que tanto enamora normalmente y que nos recuerda que realme cuida mucho sus productos.

En general, el teléfono cumple, aunque en este apartado cabe esperar un poquito más en su rendimiento del día a día. No es una crítica severa, pero sí una observación honesta sobre las limitaciones propias de su segmento de precio.

Experiencia de uso: realme UI con luces y sombras

realme UI 6.0 es la capa de personalización de este sistema operativo que nos recuerda bastante a Color OS, y la experiencia general es bastante satisfactoria, aunque con algunos puntos mejorables que me parecen algo problemáticos. Ojo, el sistema operativo funciona increíblemente bien, es bonito visualmente y añade algunas mejoras de calidad de vida con respecto a las aplicaciones propias de Android.

Quizás el punto más negativo del sistema operativo es que tiene muchísimo bloatware. Abogo porque las aplicaciones vengan mucho más discretas de aplicaciones de terceros, por lo que he echado en falta un mejor desempeño en este aspecto por parte de la marca. Esto puede resultar frustrante para usuarios que prefieren una experiencia más limpia desde el primer encendido. Y es que, deshacernos de estas aplicaciones innecesarias puede ser algo bastante farragoso en ocasiones.

El realme 14 5G vino con lo último en su momento

Por otro lado, no se ha apostado por la IA en este modelo de la gama de entrada. No hay ninguna de las aplicaciones propias de realme destinadas a estas funciones, algo que se entiende dado el posicionamiento del dispositivo, pero que marca una diferencia clara con modelos superiores de la marca.

La interfaz en sí misma es funcional y relativamente intuitiva, aunque la cantidad de aplicaciones preinstaladas puede hacer que la experiencia inicial no sea tan pulida como cabría esperar. De nuevo, como con casi cualquier teléfono de esta gama, nos encontramos con que tenemos que llevar a cabo una limpieza inicial nada más comprarnos el móvil.

Batería: la gran estrella del conjunto

La batería es absolutamente increíble en todos los aspectos, es monstruosa, puede ofrecer entre 9 y 10 horas de pantalla activa. Esta autonomía es simplemente impresionante y marca una diferencia sustancial respecto a muchos competidores en su rango de precio.

Si eres un usuario que está siempre utilizando el teléfono, vas a notar que la duración de la batería es realmente increíble. En mi experiencia personal, el rendimiento energético ha superado todas las expectativas que tenía puestas en este apartado.

El realme 14 5G tiene una batería absolutamente incombustible

En mi caso el teléfono me duraba unos tres días del 100% al 1%, lo cual es sencillamente espectacular para cualquier usuario, especialmente considerando que estamos hablando de un dispositivo orientado al gaming, donde tradicionalmente el consumo energético suele ser más elevado.

Esto se debe, claramente, a las nuevas baterías de silicio, que están, lentamente, comiéndole el mercado a las de iones de litio convencionales. Esta tecnología más avanzada no solo ofrece mayor capacidad, sino también una degradación más lenta con el tiempo, lo que significa que la batería mantendrá su rendimiento durante más tiempo.

Cámaras: menos es más

Menos es más para el realme 14 5G

En el aspecto de las cámaras, queda claro que menos es más. Siempre lo he pensado, y en este caso es lo mismo, ya que no tiene más de dos lentes y una de ellas realmente solo sirve como apoyo para la principal, así que es como si solo tuviéramos una. Esta filosofía de simplicidad puede ser más honesta que incluir múltiples sensores de relleno.

Las cámaras no es que sean brillantes, pero dentro de su gama están por encima de la media. Es importante tener expectativas realistas con un dispositivo de este precio, y bajo esa premisa, el resultado es bastante satisfactorio.

Las fotografías son muy nítidas, saturadas al estilo que le gusta tanto a la marca y en general capta muy bien la luz. El procesamiento de imagen mantiene esa línea estética característica de realme, con colores vivos y contrastes marcados que resultan atractivos a primera vista. Evidentemente no son como los topes de gama de realme, cuyas cámaras mejoran incluso a la realidad. Pero, no está nada mal.

En general cumple de lujo de día, capturando imágenes con buen detalle y colores atractivos que funcionan perfectamente para redes sociales y uso cotidiano. La cámara principal demuestra ser competente cuando las condiciones de iluminación son favorables.

Pero, de noche, como cualquier cámara de su segmento, ofrece unos resultados mixtos y tirando a malos. Esta es una limitación técnica comprensible dado el precio del dispositivo, pero que conviene tener en cuenta si la fotografía nocturna es importante para tu uso diario.

Conclusión: un teléfono gaming honesto y con las cosas claras

El realme 14 5G es un dispositivo solvente en prácticamente todos los apartados dentro de su gama, y después de haberlo usado durante un tiempo considerable, puedo afirmar que cumple con las expectativas que genera.

Durante el tiempo que lo he usado me ha gustado bastante y me ha ofrecido buenos resultados en el día a día. La experiencia general ha sido positiva, especialmente considerando su posicionamiento en el mercado y el precio al que se ofrece.

No es un tope de gama, ni intenta serlo, por lo que encontramos limitaciones como su procesador para el día a día o las cámaras en el modo nocturno. Estas limitaciones son comprensibles y no restan valor al conjunto, siempre que las expectativas estén bien calibradas.

La balanza es positiva a la hora de analizar el realme 14 5G

Sin embargo, es un teléfono que recomiendo para aquellos que quieran disfrutar del gaming o simplemente busquen una opción asequible sobre los trescientos euros. El enfoque gaming se nota en detalles como los accesorios incluidos, el diseño agresivo y, especialmente, en el rendimiento gráfico que permite disfrutar de los juegos más exigentes.

La batería excepcional y la pantalla AMOLED de calidad son sus puntos más fuertes, mientras que el software cargado de bloatware y las limitaciones en fotografía nocturna representan sus principales debilidades. En el balance final, se trata de un dispositivo honesto que cumple su propósito sin pretender ser lo que no es.