Una pantalla flexible y sensible a la presión, ojo a la última patente de Samsung
Samsung no descansa en la carrera de la innovación, y si el futuro de los smartphones son las pantallas flexibles y los teléfonos plegables ahí estará el gigante coreano para mostrar su potencial entre los primeros fabricantes que desembarquen seriamente. No hablamos obviamente del ZTE Axon M, sino de esos LG y/o Galaxy X que se esperan para el segundo semestre de este mismo año.
De hecho, relativo al Samsung Galaxy X tenemos hoy más novedades y muy interesantes, y es que tal y como publicaba esta tarde MobielKopen el gigante coreano ha registrado una patente acerca de una pantalla flexible y sensible a la presión, nada menos, que ya se especula podría estar en el primer teléfono plegable de Samsung.
Dicha patente puede consultarse en su totalidad en la web de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual -WIPO, por sus siglas en inglés-, y como veréis se trata de una implementación similar a la realizada por Apple en sus últimos iPhone con su tecnología 3D Touch, o a la funcionalidad Force Touch explorada por Huawei con su Mate S.
Obviamente el Galaxy X no sería el primer smartphone Android en incorporar una pantalla sensible a la presión, pero sí podría tratarse del primer acercamiento serio a esta tecnología en la plataforma Android, y realizado además por un smartphone que pretende romper el actual paradigma de smartphone.
Mejorando la interacción usuario-smartphone con un panel flexible y sensible
Muy pocos modelos han intentado emular a Apple y su tecnología 3D Touch hasta la fecha, y es que la funcionalidad de un panel sensible a la presión todavía está por explorar en Android y ciertamente no se le han encontrado demasiadas ventajas.
De hecho, por poner un ejemplo palpable, Google mismamente presentaba los Launcher Shortcuts con Android Oreo permitiendo expandir menús en los iconos, pero esta funcionalidad no precisa realmente de un panel que detecte la presión y puede utilizarse con cualquier teléfono Android manteniendo pulsado el icono. Los propios Google Pixel 2 y Pixel 2 XL no disponen de esta tecnología.
Veremos lo que busca Samsung con un panel que debería ser flexible, implementado en un smartphone que puede plegarse, y ampliando además la interacción con sensibilidad a la presión por parte del usuario. Imaginar posibilidades es sencillo, llevarlas a cabo de una forma funcional es otra cosa, así que tocará experimentar.
Lo que está claro es que sin riesgo en la lucha no hay gloria en la victoria, y sin firmas que se arriesguen no habría innovación, ¿o acaso sabía LG que los sistemas modulares del G5 no funcionarían del todo bien en el mercado? ¿O Google y sus gafas Glass? ¿Y si Samsung no hubiese rescatado a los stylus con su exitosa gama Note?
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