El CEO de Cloudflare muestra gran inquietud y preocupación sobre el mayor peligro de Internet: "Es un peligro existencial"
Matthew Prince alerta de que los resúmenes de IA están acabando con el tráfico web y los ingresos de editores y creadores de contenido
Los rastreadores de inteligencia artificial están acabando con el modelo económico de Internet, según Matthew Prince, CEO de Cloudflare. Durante un evento de Axios en Cannes, Prince advirtió del descenso brutal del tráfico web que están provocando los sistemas que dan información directamente sin mandar usuarios a las webs originales.
La cosa se ha puesto fea en los últimos meses. Según podemos leer en Techspot, Google hace ahora 18 rastreos por cada visita humana, cuando antes eran seis. OpenAI se va a 1.500 rastreos por visita, y Anthropic directamente alcanza los 60.000 rastreos por cada usuario real que entra.
El nuevo ecosistema está rompiendo las reglas del juego
Ya no funciona lo que funcionaba antes. Aunque Google prometió que sus resúmenes generados por IA iban a mandar más tráfico a las fuentes originales, los números dicen otra cosa. Los usuarios consiguen lo que buscan directamente desde las interfaces de IA y no se molestan en hacer clic.
Y la cosa va a ir a más. El futuro "Modo IA" de Google va a ofrecer respuestas completas generadas por inteligencia artificial, mientras que herramientas como los resúmenes automáticos de YouTube ya están demostrando que la IA elimina las ganas de ver el contenido completo. Incluso la opción de resumir documentos va por la misma línea: consumir información procesada en lugar de la original.
Cloudflare no se ha quedado de brazos cruzados. Su "Laberinto de IA" engaña a los rastreadores que no hacen caso a las instrucciones de bloqueo tradicionales. La herramienta los manda por rutas llenas de enlaces sin sentido generados artificialmente, haciendo que desperdicien tiempo y recursos sin conseguir nada útil.
Prince no anda con rodeos cuando habla del problema. "Es un peligro existencial" para Internet tal y como lo conocemos, donde webs y creadores viven del tráfico que genera ingresos publicitarios. Si los usuarios dejan de entrar en las fuentes originales, crear contenido nuevo deja de ser rentable.
El tema de cómo compensar a los creadores sigue sin resolverse. Aunque sistemas como ChatGPT incluyen enlaces a las fuentes que citan, los datos de Cloudflare muestran que los usuarios casi nunca hacen clic en esas referencias. La gente cada vez confía más en que las respuestas de IA son suficientes.
Estamos ante un momento clave para Internet. La pelea entre innovación y supervivencia económica marca lo que está pasando ahora mismo, donde las grandes tecnológicas desarrollan IA cada vez más potente mientras webs y creadores intentan adaptarse a una realidad donde su contenido se consume sin que nadie les visite.