Hay un robot cuyo aspecto es terrorífico, pero que ha dado un paso fundamental en los últimos meses: aprende por imitación
El diseño de los robots rompe con el valle de lo inquietante

En el mundo de la robótica, la apariencia puede ser engañosa. Mientras que algunos desarrollos buscan imitar la fisonomía humana con precisión casi inquietante, otros priorizan la funcionalidad sobre la estética. Este es el caso de una reciente creación que, a pesar de su aspecto intimidante, ha logrado un avance revolucionario en la interacción humano-máquina que podría transformar por completo el futuro de la automatización. En general, todos los robots generan cierta inquietud a la hora de verlos actuar, incluso se están inventando metales capaces de autorrepararse.
La imitación como puente hacia la autonomía robótica
La Universidad de Stanford ha presentado recientemente un impresionante logro en el campo de la inteligencia artificial aplicada a la robótica humanoides. Se trata de "HumanPlus", un robot que, más allá de su apariencia poco amigable, ha conseguido desarrollar una capacidad que lo acerca significativamente al comportamiento humano: aprender nuevas habilidades simplemente observando.
A diferencia de los sistemas robóticos tradicionales, que requieren programación específica para cada nueva tarea, HumanPlus puede adquirir habilidades de forma autónoma mediante la observación de acciones humanas. Según Inspenet, este prototipo solo necesita aproximadamente 40 horas de exposición a datos de movimientos humanos para comenzar a reproducir actividades complejas como boxeo, tocar el piano o jugar ping-pong.
El sistema utiliza una tecnología sorprendentemente simple en su concepto: una cámara RGB estándar que, combinada con un enfoque integrado de captura de movimiento, permite al robot analizar e imitar los movimientos completos del cuerpo humano en tiempo real.
Las pruebas realizadas han arrojado resultados asombrosos. HumanPlus ha demostrado tasas de éxito que oscilan entre el 60% y el 100% en diversas tareas cotidianas como calzarse zapatos, recoger objetos de estanterías o doblar ropa, tras observar hasta 40 demostraciones de cada actividad.
Anatomía de un robot capaz de aprender por sí mismo
Basado en el modelo H1 de Unitree y con una altura de 1,75 metros, HumanPlus incorpora manos desarrolladas por Inspire-Robots junto con muñecas personalizadas que le otorgan una destreza notable. Su diseño incluye seis grados de libertad en cada mano, con un grado de libertad por dedo (excepto el pulgar, que cuenta con dos), y muñecas capaces de rotar en un plano.
En total, el robot cuenta con 33 grados de libertad y dos cámaras web RGB ubicadas en su cabeza. Sus capacidades físicas son igualmente impresionantes: puede manipular objetos aplicando una fuerza de hasta 10 Newtons, soportar cargas de hasta 16,5 libras en sus brazos y generar un torque de 360 Newton-metros con sus piernas.
Aunque su precio estimado de 107.945 dólares podría resultar prohibitivo para muchos, su versatilidad y adaptabilidad representan un valor potencial significativo para aplicaciones especializadas en diversos sectores.
Un aspecto particularmente destacable del proyecto es su naturaleza de código abierto. Los investigadores han compartido su trabajo en GitHub, fomentando la colaboración y el desarrollo continuo por parte de la comunidad científica interesada en la robótica avanzada. A medida que estos sistemas evolucionan, cabe esperar que robots humanoides como HumanPlus asuman roles cada vez más relevantes en nuestra sociedad, integrándose progresivamente en nuestras vidas cotidianas y entornos profesionales con una capacidad de adaptación sin precedentes.