Paneles solares sobre el agua de los embalses: la nueva solución de Alemania para aumentar la producción de energía renovable
La producción de energía solar llega a embalses y lagos para aligerar la demanda de superficie de tierra

La energía solar se ha convertido en una de las fuentes de energía de más valor en el panorama energético mundial, donde las opciones fósiles están cada vez menos priorizadas. Sin embargo, la instalación masiva de paneles está generando también un impacto negativo en la cantidad de terrenos de cultivo que se están viendo sustituidos por "granjas solares". Pero Alemania apuesta por una curiosa y llamativa solución: situar estos mismos paneles en superficies acuáticas como lagos o embalses.
Superficies acuáticas que generan energía
La compañía SINN Power ha sido la que ha llevado la iniciativa de tal proyecto, con el que, ocupando pequeños espacios (proporcionalmente respecto a toda la superficie de una masa de agua) de lagos y embalses se puede crear una gran cantidad de energía con la que aumentar el suministro eléctrico del parque energético de Alemania. Así, de este modo, se ayuda también a reducir la presión sobre los espacios de tierra necesarios para seguir expandiendo la producción de energía solar.
Se trata de un método pionero en el mundo para producir energía eléctrica, y en el ejemplo del lago bávaro en el que han empezado a producir energía, destacan el hecho de utilizar solamente el 4,65% de la superficie de dicho lago, reduciendo al máximo el impacto posible que pueda generar. Asimismo, los cables de alimentación también se sitúan por encima del lago para proteger su interior y no perjudicar el desarrollo de fauna y flora en dicho ecosistema.
De hecho, SINN Power afirma que sus paneles solares situados sobre superficies acuáticas no tienen ningún impacto negativo en vegetación y animales autóctonos. De hecho, por el contrario, la calidad del ecosistema ha mejorado y ahora se pueden encontrar más especies de peces que antes de llevar a cabo dicha instalación, ya que las bases acuáticas sobre las que se sitúan los paneles se han convertido en refugios improvisados y espacios óptimos para algas y peces.
El equilibrio entre el cuidado y el impacto ambiental
La compañía que se ha encargado del desarrollo de estos paneles y su infraestructura también afirma que nunca cubrirán más del 10% de ninguna superficie acuática para evitar en la mayor medida posible que cambien los ecosistemas en los que se sitúan. Porque, aunque sean favorables para el desarrollo de vida, también puede generar problemas por sobreabundancia. De todos modos, la ley de Alemania sitúa el máximo legal en un 15%, por lo que el impacto generado entra dentro de las normas y estándares marcadas por expertos del sector.