TEAC lanza el PD-507T, un lector de CD para expertos y fans de la personalización
El PD-507T no es un reproductor al uso: lee CDs pero necesita un DAC externo para convertir la señal digital en sonido audible

TEAC es una de esas marcas japonesas que conocen bien los profesionales del audio, pero que pasa más desapercibida entre el gran público. Sus equipos han sonado en estudios de grabación y emisoras de radio durante décadas, y ahora presenta el PD-507T, un aparato que hace algo muy específico: lee discos compactos y extrae su información digital, pero no la convierte en sonido. Para eso necesitas conectarlo a un DAC (convertidor digital-analógico) externo, que es el que se encarga de transformar esos datos en música.
Según podemos leer en eCoustics, este lector monta el mecanismo CD-5020A que TEAC lleva usando años en equipos de radiodifusión profesional. Un componente probado en entornos donde no se puede permitir ni un fallo, y que ahora adaptan para audiófilos con un chasis diseñado para minimizar vibraciones y una electrónica específica para esta tarea.
¿Por qué separar la lectura del CD de su conversión a sonido?

El TEAC PD-507T con el DAC del mismo fabricante
La pregunta es lógica: ¿para qué tener dos aparatos cuando un reproductor de CD normal hace las dos cosas? La respuesta está en que no todos los convertidores suenan igual. Los hay más cálidos, otros más detallados, algunos mejores para jazz, otros para rock... Los audiófilos más exigentes prefieren elegir ellos mismos esta parte del sistema, y tener el lector por separado les permite cambiar el convertidor sin tocar nada más.
TEAC lo tiene claro con este PD-507T: nada de conversión interna, solo lectura y envío de datos digitales limpios. La alimentación la han diseñado con un transformador especial y circuitos separados para cada parte del aparato: uno para el motor que gira el CD, otro para el láser que lo lee, otro para el reloj interno y otro para las salidas. Todo esto para que unas partes no interfieran con otras y la lectura sea lo más precisa posible.
Entre las cosas más llamativas está la compatibilidad con relojes externos muy precisos, como el CG-10M-X de la propia TEAC. En el mundo del audio digital, el tiempo lo es todo: cada bit de información tiene que llegar exactamente cuando toca, y estos relojes externos son muchísimo más precisos que los internos de cualquier aparato. También puedes desactivar las salidas que no uses para mantener todo lo más limpio posible.






El diseño exterior mantiene la línea de la serie Reference 500 de TEAC, con una pantalla ámbar muy legible y unos pies especiales que aíslan el aparato de vibraciones externas. Que no os engañe: cualquier vibración, por pequeña que sea, puede afectar a cómo el láser lee el CD. De ahí que la parte superior también "flote" un poco respecto al chasis principal. Se controla con un mando que incluye las funciones típicas: repetir, aleatorio, programar pistas...
El mercado del CD mantiene más actividad de la esperada. Shanling presentó este verano el CD80 II, que mezcla la reproducción clásica de CD con Bluetooth y salida balanceada para auriculares buenos. La misma marca también lanzó el EC Zero T, un reproductor portátil que usa válvulas (sí, como las de las radios antiguas) para darle un sonido más analógico a los CD.
Onkyo tampoco se ha quedado quieta con su Icon C-30, que es justo lo contrario al TEAC: un lector todo en uno que defiende la sencillez frente al streaming. Teufel ha ido por otro camino con el KOMBO 62, que combina reproductor de CD y capacidades de streaming, porque al final mucha gente quiere lo mejor de ambos mundos.
El TEAC PD-507T llegará a las tiendas durante los últimos meses de 2025 por 1.299 euros. No es barato, pero tampoco es descabellado para lo que ofrece: un mecanismo de lectura profesional, electrónica especializada y la garantía de una marca que sabe de qué habla en audio profesional. Eso sí, recordad que necesitaréis un convertidor aparte para escuchar música, así que el desembolso final será considerablemente mayor.