Bang & Olufsen quiere que te gastes 1.200 € en estos auriculares Bluetooth de lujo

Bang & Olufsen acaba de lanzar los Beo Grace, unos auriculares inalámbricos con cancelación de ruido que cuestan 1.200 euros. Se suman a un catálogo donde ya están los Beoplay EX (320 euros) y los Beoplay Eleven (480 euros). El mercado está saturado de propuestas de Apple, Sony, Bose y un sinfín de fabricantes más, pero la firma danesa ha decidido apostar por un precio elevado y un diseño de aluminio con acabados escultóricos.

Según se recoge en eCoustics, los Beo Grace se centran en calidad de construcción y un sonido afinado por sus ingenieros. Kristian Teär, CEO de Bang & Olufsen, los ha presentado como "más que un producto, un símbolo del siglo venidero" inspirado en joyería fina y fabricado con el aluminio característico de la marca. Palabras mayores para unos auriculares inalámbricos, desde luego.

Aluminio pulido y un estuche que se abre como un reloj de lujo

El diseño de los Beo Grace toma prestados elementos de la joyería fina. Los vástagos son de aluminio pulido y recuerdan a los Earset 3 que Bang & Olufsen lanzó en 2008. El perfil metálico se ha adaptado a la era inalámbrica reduciendo el tamaño todo lo posible. Cada auricular viene con un estuche de carga de aluminio granallado que se abre con un movimiento mecánico limpio, casi como si fuera un reloj de gama alta. El acabado es refinado y cabe en un bolsillo sin problemas.

Los Beo Grace están pensados para sesiones largas de escucha. Las puntas son ovaladas, lo que mejora el ajuste y el sellado en el canal auditivo. Hay una malla de nailon integrada que protege el driver del polvo y otros residuos. La certificación IP57 cubre polvo y agua, así que resisten salpicaduras y sudor sin mayor problema. La autonomía llega a 4.5 horas con ANC activado, y hasta 17 horas si cuentas el estuche de carga.

La arquitectura acústica la han afinado los tonmeisters de Bang & Olufsen, que es como llaman a sus ingenieros de sonido. Se basan en principios que ya aplicaron en los Beoplay H100, sus auriculares de diadema de gama alta. Cada auricular lleva un driver de titanio de 12 milímetros tras una rejilla de aluminio fresada con precisión. Hay soporte para Audio Espacial optimizado para Dolby Atmos, que en teoría mejora la sensación de inmersión al escuchar contenido compatible.

La cancelación activa de ruido es adaptativa. Bang & Olufsen asegura que es cuatro veces más efectiva que la de sus modelos anteriores. La tecnología EarSense ajusta el sonido y el ANC en tiempo real analizando el ruido del entorno y las características acústicas de tu oído. Hay también reducción avanzada de ruido de viento y un sistema de tres micrófonos en cada auricular para mejorar la calidad de las llamadas, algo que nunca está de más.

Los controles son táctiles y están alojados en el tubo de aluminio. Dan una retroalimentación sonora que imita un clic mecánico, lo que hace que cada pulsación se sienta más precisa que en otros auriculares con controles táctiles. La función NearTap permite ajustar el volumen con toques cerca de la oreja: a la derecha sube, a la izquierda baja. No hace falta tocar directamente el auricular. El modo TrueTransparency usa micrófonos de alta precisión para dejar pasar el sonido ambiente de forma natural.

La carga rápida da hasta 2.5 horas de reproducción con solo cinco minutos enchufados. Con carga completa, los auriculares aguantan hasta 4.5 horas, o hasta 17 horas si cuentas el estuche. Bang & Olufsen se ha asociado con Breathe, una empresa especializada en gestión inteligente de baterías. Los Beo Grace han superado 2.000 ciclos de carga en pruebas internas, muy por encima de los 500 ciclos que suelen aguantar la mayoría de auriculares inalámbricos antes de perder capacidad.

Los Beo Grace funcionan con la Plataforma Amadeus de Bang & Olufsen, diseñada específicamente para wearables. Es actualizable mediante software, lo que significa que los auriculares pueden recibir mejoras de rendimiento y nuevas funciones con el tiempo. No todos los fabricantes ofrecen este tipo de soporte a largo plazo, así que es un punto a favor.

Ahora bien, hay que hablar de lo evidente. Estamos ante unos auriculares Bluetooth que cuestan 1.200 euros. El Bluetooth comprime el audio por definición, así que no vas a tener calidad lossless real por mucho driver de titanio y aluminio fresado que lleven. Los códecs más avanzados como LDAC o aptX HD mejoran la situación, pero siguen siendo compresión. Pagar esta cantidad por auriculares inalámbricos es una apuesta por el diseño, los materiales y la marca más que por la calidad de audio pura y dura.

El precio de 1.200 euros los coloca en un segmento muy concreto. No compiten con los AirPods Pro 3 ni con la mayoría de modelos del mercado. Van dirigidos a un público que valora el diseño y los materiales tanto como el sonido. En este rango de precios hay opciones interesantes.

Además, tienen competencia muy fuerte. Los auriculares Denon ofrecen una calidad de audio sobresaliente con tecnología avanzada y respuesta de frecuencia amplia. También están los Bowers & Wilkins Pi8, que han destacado por su cancelación de ruido y calidad premium. Loewe entró hace poco en el mercado de audio con sus primeros auriculares Leo, unos over-ear con cancelación activa adaptativa, 65 horas de batería y materiales premium por 1.299 euros. Los Bowers & Wilkins PX8 S2 también están en este segmento con ANC excelente, audio Hi-Res y 30 horas de autonomía –y la mitad de lo que pide Bang & Olufsen por tenerlos–.

Los Bang & Olufsen Beo Grace estarán disponibles a partir del 17 de noviembre de 2025, pero ya se pueden reservar por los ya mencionados 1.200 euros en la web de Bang & Olufsen. Incluyen garantía de tres años. Hay una funda de cuero opcional en Negro Infinito, Rojo Arándano y Gris Concha por 240 euros adicionales.